Revista Maternidad

¿Hacia dónde vamos a terminar como humanidad?

Por Maternarte

Ya no sé cuántas veces he escrito que en cualquier momento adopto como slogan "cuidar el vínculo mamá-bebé es cuidar la sociedad". Muchas otras veces he destacado la labor de las mamás blogueras que me he cruzado desde que ingresé a este mundo, que difunden y promocionan la crianza con apego, la lactancia materna, el upa, el colecho, entre otros temas.
Muchas veces he leído entradas interesantísimas de otras mamás blogueras, que hacen un profundo análisis de la sociedad, de que, con la movida del feminismo por los años 70, en la lucha por la igualdad con el hombre, nos hemos ido al otro extremo, y las mujeres nos hemos desconectado de lo que nos hace mujer: ser madres. Y por eso esta sociedad, también muy teñida de conductismo, todavía en gran porcentaje alaba mamaderas, cunas y habitaciones para que los bebés duerman solos. Pues en la igualdad de hombres y mujeres, con la mujer teniendo que salir a trabajar y competir en el mercado laboral, la disponibilidad completa hacia nuestros bebés pasa a un segundo plano.
Por eso, así como en algún momento un ministro español propuso la escolarización obligatoria desde que el bebé nace para que las madres, en su igualdad con los hombres, puedan salir a trabajar "tranquilas", también se van creando, inventando, diseñando, distintos artilugios para que los bebés sean independientes lo antes posible.
Mi hijo tiene dos años y cuatro meses, y desde hace un tiempo (por distintas circunstancias, que ya he contado en otras entradas) toma mamadera. (Ojalá hubiera yo descubierto esta cibertribu antes, hubiera encontrado ayuda y técnicas concretas para poder continuar amamantando, como quise desde el embarazo, pero no pudo ser). La cuestión es que desde que él toma mamadera, siempre se la he dado yo. Sabe tomarla solo, pero para los dos es un hermoso rito, aún al día de hoy, que él la toma a upa mío, y nos abrazamos, y nos acariciamos, como si fuera la teta. Me pide "leche", yo traigo la mamadera, y a él se le dibuja una sonrisa de oreja a oreja, nos ponemos cómodos en la cama, él a upa mío, y nos acariciamos mientras él toma la leche. Imaginarán las críticas "oh, pero debería tomar solo!", o "oh, pero tiene que acostumbrarse a que se la dé cualquiera!" ... como si el chico fuera un objeto para que esté de brazos en brazos (aclaración: por supuesto que otras personas pueden hacer upa a nuestros hijos, pero el lugar sagrado para cualquier bebé son los brazos de su madre)...
Contado esto, pueden imaginar para mí el horror que fue leer esta nota, sobre que se inventó un "brazo mecánico" para que la madre no tenga que perder tiempo dando la mamadera a su hijo...
¿Hacia dónde vamos a terminar como humanidad?
A un bebé no sólo hay que alimentarlo de comida, hay que nutrirlo de afecto, de contención, de brazos, de amor... Se ve que los señores que inventaron este artilugio nunca han conocido de la experiencia que hace muchos años en un laboratorio se experimentó en monos el vínculo mamá bebé. Este video está con audio en inglés, pero creo que no hace falta comprender el idioma para entender la idea. Harlow fue un señor que quiso saber cómo y cuánto influía en un bebé el contacto con su madre, y por suerte experimentó con monos. Aunque sea con un monito, y no con un bebé real, da mucha tristeza verlo.

http://www.youtube.com/watch?v=X_Nna5Fh6-E
Ahora pregunto yo... ¿no hay demasiado parecido entre este "invento revolucionario" de un brazo mecánico para que la madre no pierda tiempo dando la mamadera, y la mamá mona de metal que sólo tenía una mamadera para ofrecer al monito? ¿Hacia dónde vamos como humanidad si este invento prospera y se masifica? Admiro la gente creativa e inventora, pero este invento me da escalofríos...
Sobre este tema empecé a horrorizarme cuando Louma lo contó, también horrorizada, en una entrada de su blog http://www.amormaternal.com/2011/07/momfeed.html


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LOS COMENTARIOS (1)

Por   Yahorapapas
publicado el 03 agosto a las 15:03
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Me parece un poco terrible el brazo mecánico para dar de comer a los bebés. Una de las cosas más positivas que hay en darle el pecho al bebé es el vínculo que se forma. Si no nos es posible o hemos dejado de dar el pecho, al alimentar al pequeño en nuestros brazos también se establece ese vínculo, incluso si el bibe se lo tiene que dar otra persona al tenerlo en brazos también se establecerá una complicidad. Este invento que nos proponen elimina todo trato personal con el bebé y trata la lactancia como algo mecánico y que se puede relegar para hacer otras tareas. Inventos como estos mejor que se los ahorren...

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