Heads up, el uno contra uno del póker

El póker heads up es una forma de póker que se juega entre dos jugadores. Se puede llegar a esta situación de diferentes formas.  Una es que solo queden 2 jugadores en la mesa, es decir, que sean los finalistas del torneo, algo necesario en la mayoría de los torneos de póker y SNG para determinar el campeón del torneo.

Puede llegarse a una situación de heads up también en los torneos de póker shoot out en los que tan solo se clasifica para la siguiente fase el campeón de cada mesa. Es evidente que también tendrá que superar el mano a mano obligatoriamente.

Por último, están los torneos de heads up propiamente dichos, donde todos los enfrentamientos se producirán mano a mano, clasificándose el ganador de la eliminatoria para la siguiente ronda.

En los dos primeros casos los dos jugadores llegarán al enfrentamiento con un número diferente de fichas y con las ciegas bien altas.

Todo lo contrario sucede en los torneos heads up donde ambos comienzan con todas las fichas intactas y con las ciegas al mínimo, lo que permitirá numerosos movimientos y marcha atrás. La paciencia es clave.

Hoy vamos a hablar de los 2 primeros casos;

Las reglas del poker heads-up son los mismos que en un juego con tres o más jugadores. Sin embargo, la estrategia empleada tiende a ser muy diferente con respecto a partidas de póquer de múltiples jugadores. Ya que sólo dos jugadores participan en la mano, la posibilidad de tener la mejor mano es mucho más alta que en un juego de varios jugadores, lo que hace que la partida sea más agresiva de lo normal.

En los dos primeros casos, lo normal es que lleguemos de una forma desequilibrada con respecto al número de fichas. Puede ser que tengamos muchas más fichas que el rival o muchas menos.

En ambos casos jugaremos a tope, de all in constantemente puesto que la jugada de uno u otro no permite contemplaciones ni tampoco la marcha atrás. Iremos a tope preflop y en proyectos. Sin retroceso.

En el otro caso puede que lleguemos al heads up con fichas equilibradas, esta es otra historia que merece la pena estudiar. Variaremos el juego de una forma constante, entraremos subiendo indistintamente con manos débiles y fuertes por igual e indistintamente y lo mismo haremos igualando en la ciega pequeña con manos grandes y pequeñas con el fin de sorprender y de que el rival no nos coja el truco. Por supuesto atacaremos con todo, a tope, cuando consideremos que tenemos posibilidades de ganar la mano sin titubear. Haremos subidas y resubidas con el fin de echarlo atrás y sacar las máximas fichas posibles en cada retroceso del rival. La agresividad y la fortuna nos harán ganadores.

¡¡¡Suerte!!!