HOMBRES vs MUJERES

Me fascina, me divierte y me causa temor y furor, como es de complejo poder entender y comprender la maquinaria mental de una mujer y me parece lamentable lo simple que es entender la penosa neurona masculina de un hombre, que hace tremendos esfuerzos para intentar convencer a sus compañeras de que suban a la azotea que se está más fresquito.

Hablaremos de aquellos ancestrales conceptos básicos, que pasaron de padres a hijos, de generación en generación, que son necesarios para entender a las damas, y que a veces dada su sofisticación, parecen sacadas de un ajedrez (el sexo es como el ajedrez, a veces hay que saber en qué posición poner a la reina).

Tras cuatro décadas de estudio y comprensión, he llegado a comprender que la experiencia, los años y cientos de películas tipo comedia-romance-drama llevan a creer que realmente conoces a las mujeres: nada más lejos de la realidad. Definamos los tres Conceptos Elementales que todo hombre debe aprender de memorieta (como el padre nuestro):

Concepto de Negación. Cuando una mujer dice no, quiere decir ¿sí?… pues no. Cuando una mujer dice no, quiere decir no. Es más la duda ofende. Tú por muy honesto, sincero, romántico, audaz, bueno y fiel a tus principios que creas tener, por más que insistas si dice que no, es no. No hay nada que hacer ni que rechistar; sea lo que sea lo que estés intentando venderle o entrarle por los ojos, la decisión ya está tomada y desde mucho antes que se iniciara el conflicto, ya tenía preparada la respuesta.

Si encima eres cansinamente insistente, la reafirmas aún más su decisión; aunque no lleve razón se convierte en pura cabezonería, en no dar su brazo a torcer, en no permitirte ni por tan sólo una vez, que puedas imaginarte que tienes un ápice de razón (darte la razón a ti, hasta ahí podíamos llegar, pero quién te has pensado tú que eres, ¡já!).

Tu oportunidad. Consiste en darle lo que ella quiere escuchar, dale la razón en todo, nunca dudes y que parezca sincero: Ganarás puntos. Memoriza y recuerda (para siempre) que existe una tabla imaginaria donde día a día, sumas o restas puntos. Nunca sabrás con qué número de puntos empiezas, sólo que si el primer día que quedas con ella no haces más que restar, no habrá segunda cita; tenlo en cuenta.

Afirmación. Cuando una mujer dice sí, quiere decir ¿no?.. pero a ver ¿tú en qué mundo vives?, ¿de dónde has salido?.. alma cándida, cuando una mujer dice sí, quiere decir en la mayoría de los casos puede. Es decir, es un sí condicionado. A veces es un sí para querer decir no. Sí ya sé que es complicado, pero vamos a poner algunos ejemplos prácticos para que nuestra neurona lo comprenda.

Ejemplo. Imagina que estáis en una tienda de moda para mujer. Importante: sea la tienda que sea, será su tienda favorita, nunca lo olvides. Las tiendas son como su segundo hogar y en tu caso, tu prisión de máxima seguridad. Sabes cuando entras (al flamante centro comercial) pero no sabes cuándo vas a salir.

Ella elige un vestido que a simple vista es bonito, con colores vivos y alegres para la época en la que estamos, veraniega. Su pregunta clave sería: ¿Te gusta este vestido? con sonrisa picarona y cómplice al tiempo que te coge de la mano. El 99,99 % de los casos ya sabes lo que respondería: un sí rotundo, deseoso de que se lo compre, sumar puntos, salir de la cárcel donde llevas encerrado seis horas y con suerte, llevártela a la cama esa misma noche para hacer catorce posturas del Kamasutra haciendo el amor. Pues no, cabeza hueca. Esa ansia consigue el efecto contrario.

Tu oportunidad. Sería decir no a la pregunta de si te gusta el vestidito. Pero no vale cualquier no. Tiene que ser personal, con fuerza, con carácter y además con coletilla adicional: ”No, cariño (el cariño detrás de cada no, es fundamental; suma 1 Punto) ese vestido puede que tenga colores vivos y alegres por la estación en la que nos encontramos, pero las medias mangas con puntilla no dejarían ver tus hombros redondos y perfectos, mejor con unos tirantes. Un “volantito” en la falda por encima de la rodilla, luciría más tus bonitas y aterciopeladas piernas. Es más, mira este otro que hay aquí colgado y pruébatelo, aunque valga 200 €uros lo pago yo con mi tarjeta (¡Dong, dong, dong… KO técnico!).

Lean a Pitágoras, el libro gordo de Petete, vamos hay una idea que es de teta: cómo conseguir que el ansia no nos estropee el premio final:

Ser su novi@ o ser un folla-amig@ se convierte a veces en mera obsesión. Mientras que la segunda opción no da lugar a tener que aguantar nada, cuando un@ termina, los posteriores 30 segundos de rigor basamos la relación en una rápida despedida, sin besos ni carantoñas, dado que cada uno ha conseguido lo que buscaba, así que ya puede irse rápido a tomar cubatas con los amigot@s.

Tu pareja sentimental para ti es tu novi@. A los Hombres que tienen una larga relación amorosa no los llaman “Duracel” sino Jesureros. Predican con el ejemplo llevando el peso de la relación a cuestas, como si llevaran una Cruz imaginaria a hombros hasta el feliz día de su boda.

En cambio cuando pasamos de amig@ a folla-amig@, algun@s se convierten en novi@s. Cuando se trata del “unineuroni” durante meses (el hombre) canaliza su error: hace cosas que antes no tenía que hacer cuando era folla-amigo y eso lo echa en falta: uno rápido y salir con los amigos a buscar nueva presa folla-amiga. Ahora no vale con girarte, dormirte o vestirte rápido que te han llamado el dentista a las tres de la madrugada; ahora tienes que abrazarla, darle mimos y esperar a que ella se duerma (cantándole una nana si hace falta). Porque como cometas el error de dormirte tú antes, te acusará de insensible, mal amante, que eres un folla-amigo de mala muerte y lo mismo hasta te confiesa que tu primo lo hacía mejor.. vamos esas frases que la convierten en una verdadera zor….quiero decir, simpática.

La media-naranja no existe; existe más bien el medio-limón. Suele ser relaciones astringentes y a veces amargan. Por ejemplo, imagina que vas con ella a la peluquería. La Peluquería no es sólo un lugar de cortes y lavados; hay pruebas demostrables que muestran diferencias obvias entre el tratamiento que se le da al pelo del hombre y el la mujer:

- En los caballeros entran, se sientan, les humedecen el pelo, cortan a maquinilla o a tijera, echan gomina y a pagar.

- En las señoras, además de hacerle en el pelo un sinfín de cosas más, incluido que le cambian de color más que a un pigmeo, también es su lugar de regocijo y de reencuentro. Un paraíso para ellas, no sólo porque regresan cada 15 días para comentar con su “comadrona” lo mal que ha hecho las cosas su marido esa semana, sino que además lava, corta, peina y les envuelve la cabeza en un casco endurecido por la laca (el causante del efecto invernadero son las peluquerías españolas).

Al segundo mes de visitar la misma peluquería (son visitas quincenales) cogen confianza y le confiesan a la comadrona (= madre Teresa de Calcuta) lo que más le duele a un hombre, su secreto mejor guardado: que la tiene como una nuez, que no funciona en la cama, o que solo piensa en el fútbol.

Tu oportunidad. Recomienda a tu novia cambiar de peluquería cada sesión de tinte o mechas.

Repasemos la tabla de conceptos:

- Amigo = Primo (amigo sin derecho a roce).

- Folla-amigo = Mucho sexo + ver Fútbol + jugar Deportes.

- Novio  =  Menos Sexo + Pagar Caprichos + No ver ni jugar Deportes.

- Peluquería = Lugar de Encuentro femenino + Cambio quincenal para no ser señalado.

La vida está llena de oportunidades. No dejes escapar la tuya. Si criticas lo suficiente al novio de la clienta (siendo tú la dueña de la pelu) lo mismo puedes aprovechar el momento y conquistarle. Lo que para ella es una nuez, para ti puede ser un lomo ibérico… ¡Qué lo disfrutes!