Èstos objetivos, entre otros, forman parte de mi Proyecto de las Jornadas de Disertación sobre la Antártida que organizo hace seis años ya, y que tomó mas fuerza a partir del año 2013, cuando las Jornadas se convirtieron en "Capacitación Docente sobre la Antártida".
Gracias a uno de los disertantes que hizo de nexo con la empresa Trade Baires Interntational, (la empresa que chartea a los buques rusos, que nuestro país contrató para realizar la presente campaña antártica, mientras dura la ausencia de nuestro querido Rompehielos Irízar), este viaje fue posible, sin costo alguno para nosotros, ya que la la empresa patrocinó el vuelo. Viaje del cual nos enteramos con apenas días de anticipación y les puedo asegurar que los tres nos sentimos como Sobral antes de su viaje a la Antártida, armando la mochila y buscando ropa de frío extremo en pleno verano porteño.Así fue que el día 26 de febrero partimos hacia Ushuaia, el señor Guillermo Sobral, el Licenciado Hugo Rodríguez Rocha y yo, la Licenciada Dora Gerez, en un vuelo privado de la Compañía Antartic Aviation, con cuatro pilotos expertos, todos ex pilotos navales. Un lujo tener a ellos de pilotos, en este vuelo con tanta importancia, ya que sería la primera vez que un avión privado aterrizaría en la Base Marambio, y la primera vez, que yo volaba.
Tanta importancia tenía este vuelo, que los pilotos sabiendo que llevarían al nieto del Primer Argentino que invernó en la Antártida, llevaron preparada una bandera dedicada, para Guillermo Sobral, para el momento de las fotos, cuando éste pise suelo antártico y al enterarme, reparé que me olvidé de poner en la mochila una Bandera, menos mal, que tendríamos la de los pilotos.
Sabía que volábamos a Ushuaia y que nuestro avión debía realizar una evacuación sanitaria en Marambio, por lo cual, con Guillermo, teníamos el día jueves libre, mientras el avión realizaba la evacuación y hasta tanto esperábamos que esté firmada la autorización para que Guillermo pise suelo antártico en Marambio.
Llegado el día jueves, con Guillermo luego de desayunar decidimos ir al Museo, con una amplia lista de opciones, rumbeamos hacia el Museo del Presidio de Ushuaia, lo teníamos a unas pocas cuadras del Hotel donde nos alojábamos.
Justo comenzaba la visita guiada que se realiza a la mañana, (la otra es por la tarde), en esta visita cuentan la historia del Presidio y nos invitan a recorrer la planta baja del edificio y los exteriores; en la visita guiada de la tarde se recorre el primer piso del Museo, justo donde se halla el pequeño Museo sobre el Alféres Sobral y la Expedición de Otto Nordensjhöld.
Al finalizar el recorrido con el guía seguimos recorriendo el Museo más detenidamente y luego nos dirigimos al primer piso, a donde se halla el Museo Antártico Dr. José María Sobral.
Anteriormente mencioné que nuestro vuelo se había convertido en un vuelo de evacuación, ya que una tripulante de la dotación del Buque Polar Golovnin, había sufrido una lesión en uno de sus pies.
Cuando llegó el Golovnin a Marambio, luego de realizar el aprovisionamiento de la Base Belgrano II y de la Base Orcadas, fue atendida por el médico de la Base, quien informó que devían evacuarla.
En principio, días previos no autorizaban a que el avión realizara la evacuación, pero las gestiones de la empresa, apoyadas en el Tratado Antártico y en el Capítulo Nº 5 del Protocolo de Madrid que estipula que ante una situación semejante no se debe pedir autorización para aterrizar; autorizaron dicha evacuación, la cual se realizó con éxito y a tiempo, según informaron los médicos de Buenos Aires, de no mediar nuestro vuelo y si la evacuación se demoraba más, a la joven hubiesen tenido que amputarle el pie.
Es loable destacar que me consta que la Base Marambio colaboró con excelente disposición para recibir a la aeronave.
Esa noche la cena se convirtió en festejo, por el hecho histórico del rescate, y festejamos al mejor estilo del Alférez Sobral y el resto de la Expedición con una buena cena de camaradería. Luego, de regreso al Hotel, Guillermo, Hugo y yo, nos dispusimos a conversar sobre nuestra ida aún sin autorización para ir a Marambio y sobrevolar, al menos, Snow Hill.
La conversación rondaba en el permiso que el señor Memoli, director de la Dirección Nacional del Antártico, no quería firmar, y de pronto recordé que el año pasado para las Jornadas, le había enviado correos electrónicos solicitando al menos un científico para que diserte en mis Jornadas; el señor Memoli jamás respondió mis correos electrónicos y cada vez que me comuniqué por teléfono con su secretaria la respuesta era que mi correo electrónico nunca fue recibido y que enviara otro, o que me responderían a la brevedad o la clásica respuesta... "el señor Memoli se encuentra de viaje". Así fue como en las Jornadas no hubo científicos que diserten, cuando la Secretaría General de la Armada, el Ejército y la Fuerza Aérea respondieron a mis pedidos enviando a su personal.
Sin saber si volábamos a Marambio o no, incluso los pilotos sabían tanto como nosotros, nos fuimos a dormir. Me sentí como Sobral entre los suecos, cuando la vi a la tripulante evacuada cual como los integrantes de la expediciòn sueca, hablaba un inglés bueno, por lo cual, logramos comunicarnos perfectamente en ese idioma. Ella se manifestó siempre agradecida por la cordialidad que recibió de todos nosotros, tanto en su vuelo hacia Ushuaia, como luego con el resto de nosotros, preocupada por su salud, sola en un país sin nadie que conozca. Y así fue como saqué mi Tablet y le mostré las fotos del Golovnin y grande fue su emoción, se le caían las lágrimas al ver el barco y sus compañeros.
A la mañana siguiente nos enteramos que no se había emitido aún la autorización de la oficina a cargo del señor Memoli, el deseo de Guillermo Sobral quedò incompleto, cuando ésto estaba planificado con más de un mes de anticipación.
Llama la atención la negativa, dado que se sabe que entre enero y febrero entre 400 y 500 turistas pisan Snow Hill, que llegan hasta ahí en los cruceros autorizados por la IAATO, el ente que regula el Turismo Antártico. Se sabe que Snow Hill (Cerro Nevado) es un área protegida, según lo establece el Tratado Antártico y el Tratado de Medio Ambiente específicamente, por lo cual para que alguien concurra hay rigurosos estudios de impacto ambiental que deben realizarse; tantos turistas pueden ir y el nieto de quien vivió ahí durante dos años y por lo cual la Antártida existe para los argentinos, no es autorizado por su propio país? Qué impacto ambiental causan en esa área protegida tantos turistas? se lo evaluó?, parecería que con solo portar el apellido Sobral, se determina que el impacto ambiental es mucho mayor que el que causan esas 400 o 500 personas.
A todo esto, debo destacar y felicitar por la Ceremonia que se realizó en Snow Hill (Cerro Nevado) para conmemorar un nuevo aniversario de ocupación permanente en el continente antártico, que si bien la permanencia argentina se inició en la actual Base Orcadas, el inicio invernal argentino comenzó con el Alferez de Navío José María Sobral, nada más que en el refugio original de Cerro Nevado. Celebrar el pasado 25 de febrero dicha Ceremonia, es de destacar esa decisión tomada como un hecho a felicitar a las autoridades que así lo dispusieron.
Luego de enterarnos de la no autorización y viendo estas imágenes, lo primero que vino a colación es que seguramente el personal militar y la misma gente de la DNA no necesitan autorización para ir a Cerro Nevado (Snow Hill), porque están trabajando en zona cercana al lugar o porque alguna disposición especial los autoriza. Pero luego también, al ver imágenes de contingentes o incluso de un grupo de profesionales de Artes, que pudieron ingresar en el terreno donde se erige la cabaña, desplegando en ese lugar sus materiales (telas, objetos de utilería, globos) para armar sus composiciones artísticas y hasta un integrante de ese equipo de arte, se dio el lujo de festejar su cumpleaños en ese lugar, restringido por ser zona protegida...
Nace así mi pregunta. ¿cuál es o fue el motivo?, hubo algún tema con las empresas?, no lo sabemos, solo se sabe que en el caso de Trade Baires International, lleva adelante la 6º Campaña Antártica exitosa; en el caso de Antartic Aviation, llevó a cabo una evacuación sanitaria impecable; este Blog?, el mismo que refleja los trabajos docentes de difusión de temas antárticos y la loable labor de argentinos distribuidos en las bases en el cual siempre la Dirección Nacional del Antártico (DNA) menospreció, ni siquiera contestando un "no" al envío de algún científico a las Jornadas del año 2013, para hablar de los importantísimos trabajos que realizan, para que sean escuchados por los docentes, y a los alumnos, puesto que todo el esfuerzo se vuelca en ellos y para ellos; más aún, cuando ese año las Jornadas pasaron a ser una Capacitación Docente, avaladas por el Consejo General de Educación de la Provincia de Buenos Aires. No se sabe. Lo que se sabe es que en todo esto quedó truncada la ilusión de Guillermo Sobral de conocer ni siquiera sobrevolando la isla, (que en definitiva es lo que se llegó a pedir luego de tantas trabas), donde hizo historia grande su abuelo el Alférez de Navío José María Sobral.
Lic. Dora E. Gerez
Un espacio creado, para conocer un poco más sobre la Antártida Argentina. Lic. Dora E. Gerez- Buenos Aires, Argentina
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