Hunter Killer.

Hunter Killer es una película a la que la pondría en la categoría «de submarinos» pero modernizada. Si, tendrás momentos de tensión con el sonar, la tripulación mirando hacia la cámara como si desde ella vinieran los torpedos, los torpedos en sí mismos y un capitán que se las sabe todas: de allí que la bautice «de submarinos». Ahora lo de modernizada lo dan los torpedos inteligentes-no más vieja balística de un solo tiro o a lo sumo busca calor, ahora se manejan por consola-, el robot de exploración, el minisubmarino (aunque de esto algo ya hemos visto en los 90).Es una puesta a punto con la tecnología actual de la vieja película de la Segunda Guerra Mundial o de la Guerra Fría, más bien la última dado el roce americano-soviético de fondo.Como película en sí no se va a ganar un Oscar pero resulta lo suficientemente entretenida.. Diría que cumple con su cometido pero con algunas faltas. Si tuviera que criticarle cosas no puedo omitir a los rusos hablando inglés entre ellos (a su vez esto puede ser tomado como síntoma de la poca verosimilitud de la trama) e innecesariamente hablando ruso en otras oportunidades: esto me rompe los ojos. Luego hay momentos de acción inverosímil en las que nuestro capitán (Gerard Butler) saca credenciales de macho alfa con poderes psíquicos, o bien está loco o tiene unos huevos grandes como un submarino nuclear ruso.En suma: una reedición de un clásico bélico como lo es la película de submarino, muy entretenida, con algunas fallas propias de la falta de ambición de sus realizadores que recurren a estratagemas ultra probadas para sacar adelante un filme aceptable.