¡¡i n c r e i b l e!!

Estoy totalmente convencido que en todo el planeta no hay país, región o ciudad con un porcentaje de políticos, funcionarios, famosos y periodistas absolutamente locos de atar tan sumamente elevado como el de España.

En los días siguientes al atentado de Atocha, en Barcelona se celebró una multitudinaria manifestación condenando el ataque y en solidaridad con las víctimas. Mañana se cumple una semana de los atentados y lo que en mayor número hemos recibido en Catalunya desde España han sido barbaridades, mentiras, difamaciones, desprecios e insultos, y lo único que demasiados españoles han demostrado es una descomunal irresponsabilidad. No puedo entender que todavía haya catalanes que no quieran salirse del manicomio en que el PP ha convertido a España. A lo largo de la historia, con altos, bajos y no exenta de conflictos, los catalanes hemos intentado encontrar un encaje en España que no nos obligase a renunciar a nuestro carácter, cultura e idioma, pero no hemos conseguido dejar de ser una colonia muy odiada. Encima padecemos un ataque terrorista y medio mundo y también la otra mitad, nos felicita por cómo han actuado nuestros servicios públicos y nuestro Presidente y para completar el desastre franquista una importantísima publicación norteamericana, pone a Puigdemont como ejemplo frente a las locuras de Trump. ¡¡Insoportable!!, los que llevan años asfixiando y perjudicando a esa Administración Pública felicitada por todo el mundo, excepto por ellos, no lo han podido soportar. Ni tan solo han sido capaces de demostrar un rastro casi imperceptible de inteligencia y aprovechar la ocasión para empezar a solucionar el problema de Catalunya de manera inteligente, justa y civilizada.
En relación con los atentados España se ha cubierto de excrementos pestilentes a tal nivel que se hace difícil escoger cual ha sido la peor barbaridad.
Podrían escogerse las declaraciones de Ramón Cosío, hablando en nombre del Sindicato Unificado de Policías (SUP) y la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), que entre otros disparates del mismo nivel ha acusado a los mossos de ¡¡¡¡FALTA DE COORDINACION!!!!, por no haber informado del incendio de Alcanar. Esta barbaridad la sueltan los sindicatos de unos cuerpos de policía que junto al gobierno Rajoy son tan responsables del atentado como los propios terroristas porque ocultaron a los mossos información sobre el imán de Ripoll y las intenciones de los terroristas que podían haber evitado el ataque.
En relación con esta infame e indecente acusación y al mismo tiempo, José Manuel Sánchez que durante 20 años presidió la SUP manifestaba nada menos que “El imán huele a confidente policial o del CNI que apesta”. Si se confirmase esta animalada, solo sería una más en el cúmulo de atrocidades cometidas por el gobierno de España en la lucha antiterrorista, llevado por la catalanofobia, y que da toda la impresión que en más de una organización internacional les van a pedir muchas explicaciones.
También es inexplicable el inmenso rebuzno de un teniente general del ejército, afortunadamente ya retirado, Pedro Pitarch, que aparte calificar la actuación de los mossos como desastrosa exige que sean disueltos y sustituidos por la guardia civil. El loco Pitarch sale en las fotos con un uniforme verde plagado de medallas cuando debería aparecer con camisa de fuerza.
O Cristina Cifuentes que afirma que no acudirá a la manifestación del próximo sábado porque no ha sido invitada, a lo que si Puigdemont se hubiese despeinado un poco más le podía haber contestado “Tiene razón ni la hemos invitado ni la vamos a invitar, venga, o mejor todavía, quédese en su casa”.
Adjunto un artículo de Carlos Enrique Bayo de Público que describe la desastrosa gestión del PP en la lucha antiterrorista.
BAYO PUBLICO