La mezcla de estilos diferentes es una solución decorativa con las que se pueden obtener grandes resultados, especialmente en el comedor y en el salón. Para que este eclecticismo no resulte caótico todos los elementos deben tener un nexo común qua aporte el equilibrio necesario al conjunto.
Esto lo podemos conseguir de varias formas:mediante los textiles y su paleta de colores, con los materiales del mobiliario o a través de las tonalidades que predominan en la estancia.
Una de las formas más interesantes y que es tendencia consiste en combinar muebles nuevos y antiguos. Esta forma de amueblar nuestro salón le aportará una gran personalidad.
El primer paso es decidir qué estilo predominará en nuestro salón comedor: podemos crear un ambiente contemporáneo con algunas piezas de anticuario o decorar con un estilo más tradicional incorporando alguna pieza de diseño. Todo depende de tus gustos personales y de cómo hayas decorado el resto de tu casa.
Una vez decidido el estilo principal, para lo que puedes consultar el catálogo de nuestratienda de muebles, pasaremos a estudiar las posibilidades de combinación.
Si no quieres arriesgar demasiado, lo ideal es crear un contraste de muebles de estilos diferentes pero buscando que todos ellos tengan en común texturas, formas y colores. Esta solución es sencilla y efectista y proporcionar muy buenos resultados.
En el extremo opuesto, tenemos la opción de combinar piezas vintage, rococó o muy clásicas (lo ideal es que sean muebles de anticuario) con elementos de diseño extremadamente contemporáneo y muy vanguardistas. Mezclar estas dos estéticas tan diferenciadas requiere una cierta experiencia y atrevimiento para que el resultado sea el esperado.
Combinar muebles nuevos y antiguos es una buena forma de aprovechar elementos decorativos olvidados en el desván, heredados o recuperados. Los muebles u objetos decorativos de nuestros padres o abuelos llenarán nuestra casa servirán para recrear tiempos pasados llenos de recuerdos y transformarán nuestra casa en un espacio único y totalmente personal.
Para que el resultado sea elegante y equilibrado hay que planificar de antemano con esmero y no abusar de las mezclas. Lo ideal es combinar solamente dos estilos.
Recuerda que lo más sencillo es emplear estilo rústico, colonial o vintage con estilo contemporáneo. Elige uno para que sea el predominante y selecciona unos pocos elementos del estilo secundario para dar algunos toques de contraste.
Si quieres acertar, una buena idea es decorar tu salón con un único estilo, el que sea de tu agrado, y colocar una única pieza de un estilo totalmente opuesto pero que sea el centro de todas las miradas, ya sea por su tamaño, por su función o por su valor simbólico o personal.
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