Revista Deportes

Importantes cambios en el festejo de hoy en priego

Por SubbÉtica Taurina
Como se barruntaba en distintos ambientes desde el mismo día en que se dio a conocer el cartel de la feria taurina de Priego, llegaron los cambios....
No me voy a extender mucho primero porque ayer se vivieron escenas que en nada benefician a la Fiesta, como unos empresarios a viva voz, en la terraza de una cafetería intentando realizar la cuadratura del círculo para asombro de los viandantes.
Luego la rocambolesca historia de un camión de toros aparcado en El Mojón de Cabra a la espera de que alguien de la empresa llegase con el dinero que faltaba, algo que no ocurrió y cuatro horas después los toros volvieron a su finca de Antequera.
Un retraso, otro nuevo retraso y finalmente, a las 00:55 horas de hoy domingo, comenzaba el desembarco de los toros que finalmente se lidiarán en Las Canteras, pertenecientes, ¡¡oh sorpresa!!, al hierro de Jódar y Ruchena...
Al mismo tiempo que se fraguaba la sustitución ganadera, ayer por la tarde ya se sabía que Jiménez Fortes no actuaría hoy en Priego (parte médico con complicaciones en la herida recibida en Bilbao) y a renglón seguido David Mora que decía que no, que él no actuaba con esa ganadería (así está el cotarro para vergüenza y escarnio de todos...).
Por lo tanto, antes del desembarco ya se sabía que ni Mora ni Fortes estarían hoy en Priego, por lo que la empresa se puso manos a la obra y en un periquete ya tenía dos sustitutos, que a la sazón y si no ocurre nada extraño (cruzaremos los dedos) serán Ambel Posadas y Caro Gil, que completan el cartel con Andrés Luis Dorado, el único espada que se mantiene del primigenio cartel.
Me duele decirlo pero yo sabía que ésto iba a ocurrir y así lo indiqué en la reunión de la Comisión Taurina, aunque había que dar un voto de confianza a la empresa, o al representante de ésta en Priego. Pues ahí está el voto de confianza y ahí el resultado final del cartel.
Ojo!!!. Otra cosa es lo que ocurra esta tarde sobre el albero de Las Canteras, en el que, Dios lo quiera, ojalá veamos una gran tarde de toros.

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