Nos encantan los áticos y dúplex. El hecho de ser muchas veces el único vecino del último piso del edificio, los techos abuhardillados, las terrazas y las vistas, hacen de este tipo de viviendas la mejor alternativa en ciudad a las casas de una planta. Por eso mismo están tan cotizados, hay menos para elegir y son más caros :(.
Este dúplex sueco es una monada, de espacios diáfanos y abiertos pero muy recogido y acogedor, perfecto para una pequeña familia de 3 o 4.
Me han llamado la atención detalles como las vigas del techo pintadas de negro con sus focos (estaría bien poder ver el efecto de noche cuando las luces están encendidas) y el revestimiento de la cocina en blanco y negro que imita un suelo de baldosa hidráulica.
En general se nota que los acabados y remates de este dúplex nórdico están muy bien ejecutados. Inpirador ¿verdad?
Vía: Trendspanarna, Bolaget
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