Tenía pensado no seguir con ‘Intelligence’ después de ver el piloto, pero le eché coraje y me vi el segundo y luego el tercero. No, mi opinión sobre la serie no ha variado, pero sí la perspectiva con la que la veo ahora. Y es que ha pasado de una drama de ciencia ficción a una comedia con la que te puede reír un buen rato.
Si en España teníamos a ‘Los Hombres de Paco’, en Estados Unidos llevan un tiempo mostrándonos lo inútiles que pueden ser las agencias del gobierno. Lo que pasa es que allí lo hacen sin querer. Lo vimos con ‘The Following’ y sus inútiles agentes del FBI y lo vemos en ‘Intelligence’ y ese chip que parece una broma de los ingenieros de Microsoft.
No sé si seré un “Hate-watcher”, pero me hace gracia que la gran esperanza del mundo libre y la próxima evolución humana sea un tío con un chip dentro del cabolo que se queda sin cobertura dentro del ascensor, funciona o no al acomodo de los guionistas o se puede piratear introduciendo a una china dentro de la mente super evolucionada del protagonista. Vamos que he visto a gente apañárselas mejor con un móvil o una tablet. Eso sí, nadie bebe cerveza como Josh Holloway…
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