Interviú

Desconozco si Carol y Rocío conservan una buena posición en el concurso que no veo, otro más entre los “reality shows” que proliferan en nuestras pantallas como setas en el otoño, pero desde luego que la portada de Interviú me llamó la atención, probablemente con relación a los requisitos para formar parte del elenco que participa en esta suerte de aventura. Uno, la verdad, no las encuentra acertadamente ataviadas para la exploración; tanta piel expuesta es un riesgo para las picaduras y la radiación solar, en fin, el calzado no cuadra excesivamente bien con terrenos anfractuosos y los pantalones… en fin, ¿qué quieren que les diga de los pantalones?.

Por otro lado, que nadie lo dude, se pasaría uno bastante tiempo mirando la instantánea que adorna la entrada del día; la natural belleza de la juventud, la turgencia de sus pechos, el cuidado de sus uñas -hasta las de los pies- son admirables, especialmente por parte de los caballeros, pero resultan escasamente idóneas para el pretendido fin del programa. Claro que en el fondo, lo único que interesa es la audiencia, extremo que se traduce en dinero, haciendo irrelevante al resto de circunstancias. Resulta que, al final, siempre terminamos por comprar y vender lo mismo, con diferentes nombres.