Revista Motor

Irse de acampada a la nieve con un Ferrari F40 no tiene precio.

Por Alberto @Freshimports

Irse de ruta y de acampada a la nieve ya suena a plan interesante. Pero... ¿Y si añadimos un Ferrari F40 a la historia? El plan se convierte en excelente.

¿Será un Ferrari F40 el vehículo adecuado para irse de acampada?

Definitivamente NO. Pero al dueño de este Ferrari F40 que vemos en el cortometraje parece importarle bien poco y lleva su máquina por superficies algo complicadas, por las que, de ver un Mitsubishi Evolution en su lugar, diríamos que estaría como pez en el agua.

Irse de acampada a la nieve con un Ferrari F40 no tiene precio.

Cualquier palabra o conjunto de palabras no son suficientes para describir este video, donde se ve claramente a un hombre disfrutando del un fantástico día junto a una máquina que la mayoría de nosotros a penas verá alguna vez en la vida (teniendo suerte). El Ferrari F40 siempre ha sido ese Cavallino Rampante que ha robado el alma de casi todos los que han sabido de su existencia. Reconozco que solo he tenido la oportunidad de verlo una vez en parado y otra en circulación y tengo que reconocer que su V8 de 3 litros y dos turbocompresores deleita a cualquier amante del motor con un sonido más que especial.

Irse de acampada a la nieve con un Ferrari F40 no tiene precio.

Siendo un avance para la época, ya que se fabricó de 1987 a 1992, marco un antes y un después con sus 478 cv a 7000 RPM, un par máximo de 577 Nm a 4000 RPM, 163 cv/l, sus escasos 1100 kg de peso y su estética estrictamente deportiva. El Ferrari F40 era, es y será siempre sencillamente perfecto.

Os dejo con el vídeo para que os alegréis la vista y recordad: PONED EL VOLUMEN FUERTE.

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