A finales del siglo XVII, la famosa pirata Emer Morrisey estaba en la cúspide de su carrera, gozando de un amor verdadero y enormes riquezas; pero entonces fue asesinada y maldecida con el "polvo de los cien perros", obligada así a vivir cien vidas como un perro antes de volver a un cuerpo humano con sus recuerdos intactos.
Ahora, trescientos años después, es una chica americana y todo lo que necesita es una pala y un viaje a Jamaica.
Si este libro me llamó la atención fue por su originalidad: no hay vampiros, no hay hombres lobo, no hay ningún tipo de criatura paranormal; sólo una pirata que no aparenta ser la típica chica con síndrome Bella Swan y una maldición, una maldición muy curiosa por la que a mi, personalmente, no me gustaría pasar. Después leí reseñas, y fueron estas últimas las que terminaron de despertar mi curiosidad (esa que, por lo visto, tiene el sueño demasiado ligero)
Y ahora decidme vosotros, ¿no os apetecería coger un barco e ir junto a Emer de viaje a Jamaica? ¿O quizás preferiríais ser uno de esos piratas que la acompañaron siglos atrás? ¿Querríais saber la razón de la maldición que durante tanto tiempo la ha atormentado? Yo sí, y también descubrir que le deparará a esta pirata contemporánea en el siglo XXI por sus viajes en alta mar.
¿Conclusión?: Quiero leerlo y tener esa portada que me en-can-ta entre las muchas que adornan mi colección.
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