Revista Libros

Jernigan de David Gates

Publicado el 14 mayo 2010 por Aramys

Jernigan de David Gates Hace ya un tiempo, quizá algunos años, que no leo las contraportadas de los libros; para mi gusto muchas cuentan demasiado y otras cuentan algo totalmente equivocado, así que suelo guiarme por el autor, alguna recomendación, sensaciones…

Aunque en algunas ocasiones en las que no lo veo muy claro, y no conozco al autor, ojeo la contra. Con Jernigan ojee la contra lo justo para cruzarme con esta frase: Jernigan es una divertidísima historia de un hombre blablabla…bien, cojonudo, una historia divertidísima: me apetece, siempre hace falta y tiene buena pinta.

Bien, entonces yo no debo haber leído el mismo libro que el señor que ha hecho esa contra. Ni tampoco el mismo libro que han leído en algunos blogs. A todos ellos el libro si les parece divertidísimo, a mí me ha parecido un drama.

Entendedme, no un drama de lagrima, si no un drama crudo, acido, duro.

Peter Jernigan es un tipo que ha perdido a su mujer. Y tiene un hijo de 16 años. Peter Jernigan es vago, pero no es un vago gracioso y ocioso, a Peter no le importa prácticamente nada que no sea la  ginebra. El hijo de Peter, Danny, tiene una novia,  Clarissa, y Clarissa tiene una madre, Martha. En una pequeña artimaña, los chicos se las ingenian para que sus padres se conozcan. Y zas, el amor. Peter y Martha empiezan una relación. Al poco tiempo Peter y Danny deciden vender su casa e ir a vivir con las chicas. La relación funciona solo al principio, al poco tiempo Peter pierde el trabajo y se abandona a la vida contemplativa, a la paranoia, a la ginebra y a las pastillas para la regla de Martha, se podría decir que Peter se arrastra por la vida. Por su parte Martha tiene trabajos esporádicos, ya que vive del dinero de su ex y de una vida construida en la supervivencia a base de gastar el menor dinero posible. Martha cría conejos para comer  en el sótano y los mata con una pistola del calibre 22, entre otras cosas.

Los chicos son otro mundo dentro de la novela. Se pasan los días encerrados en su habitación. Danny es un chico callado e introspectivo, que no sabemos si odia a su padre o le da una pena terrible. Actúa con suficiencia y todo le da igual. Clarissa tiene un pasado oscuro con las drogas y es aún más callada que Danny, prácticamente es muda. A todo da su aprobación y parece que orbita alrededor de Danny. La relación de Peter con su hijo es una de las claves de la novela. Una relación distante y fría, en la que Peter actúa siempre con condescendencia e ironía, haciendo sentir prácticamente siempre a su hijo, incomodo y confuso.

Con todo estos ingredientes y lo que he dicho mas arriba os vais a pensar que no me ha gustado, y no es así. La novela esta escrita con un vocabulario muy efectivo, con unos cuentos putos y mierdas por en medio que hacen que Peter sea un tío normal. La historia, como he dicho antes, es cruda, pero no es mala. Es un libro que te remueve la conciencia, y que si tienes hijos como es mi caso, te hace preguntarte constantemente si tú estas haciendo lo mismo con los tuyos. O si les hablas igual. O si lo harás en un futuro. Jernigan es una buena novela que yo ahora no hubiera leído. Quizás en otro momento.

Con todo es una buena lectura. Y no es graciosa, en serio. Voy ha hacer un símil. Espero que no me lo tengáis en cuenta. Jernigan es igual de graciosa y divertida que ver tropezar y caerse a un anciano. Ver tropezarse y caer a alguien es divertido, pero ver tropezar y caerse a un anciano es cruel y penoso.



Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista