José Luis Sampedro, el último adiós

José Luis Sampedro

En el mundo hay dos tipos de economistas, “los dedicados a hacer que los ricos sean más ricos, y los que estamos dedicados a hacer que los pobres sean menos pobres”

Con serenidad y discreción el humanista, escritor y economista barcelonés, José Luis Sampedro, fallece a los 96 años de edad en su domicilio madrileño. Sin ningún boato, tal y como era su deseo, el académico de la Lengua nos abandono el lunes 8 de abril. Aunque la noticia de su muerte nos asalta un día después, cuando sus restos mortales han sido incinerados.

Con Sampedro se va un pedazo indispensable de humanidad, que tanta falta nos hace, un pensador social defensor del derecho a vivir la vida, un imparable crítico y luchador, que abogaba por una economía “más humana, más solidaria, capaz de contribuir a desarrollar la dignidad de los pueblos”.

El autor de “La sonrisa etrusca” eligió marcharse de manera “sencilla y sin publicidad”, según cuenta su viuda Olga Lucas. No tenía miedo a la muerte, la había asumido, pero quería morir con dignidad.

Quizá consciente de su último adiós, se despidió de los suyos con un sencillo y tranquilo “Muchas gracia a todos”, para dar paso a un sueño del cual ya no despertaría.

José Luis Sampedro, vaya mi despedida en estas líneas que no pretenden alterar tus deseos, sino tan solo decirte, adiós…hasta luego. Tú ausencia se hará sentir. DEP.

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