José Pedro Pérez Llorca y la dichosa preguntita del 28-F

Hoy es el día de Andalucía, no es que yo me mate por las fronteras, regiones y nacionalismos varios, creo además que este tipo de sentimientos patrioteros son incompatibles con una ideología socialista y de izquierda. Pero bueno, a lo que iba, hoy es el día de Andalucía porque se conmemora el "Referéndum sobre la iniciativa del proceso autonómico de Andalucía", que se celebró un 28 de febrero, pero del año 1980. Ya se había cumplido el requsito de la Constitución (art. 151) previo, es decir, que las ocho diputaciones provinciales andaluzas y casi todos los municipios (97%) de la región se habían pronunciado a favor, por lo que el referéndum era el último requisito, supuestamente una tontería, un trámite teniendo en cuenta que en principio todos los partidos estaban a favor. Era el primero que se planteaba en España, ya que los privilegiados catalanes y vascos no lo necesitaban por considerarse comunidades históricas, craso error porque ya Blas Infante había redactado un Estatuto que se hubiera aprobado en 1936 si no hubiese sido por el golpe militar del General Franco, pero bueno era el único referéndum de acceso a la autonomía planteado por esta vía en España, el resto tuvo que acceder por el art. 143. La UCD, cada vez más alejada de los principios reformadores de un falangista reconvertido a centrista, se escoraba día a día a la derecha, a lo que con el tiempo sería el PP de Fraga y compañía. La UCD quería canalizar el pro­ceso autonómico de las regiones por el susodicho 143 y las guerrar internas en el seno de la derecha andaluza produjeron el cisma: el aparato hizo campaña pidiendo la abstención o el voto en blanco en dicho referéndum, a la que se sumó, en el mismo sentido, Alianza Popular, el señorito Arenas ya estaba por ahí, el eterno candidato a la presidencia de la Junta; pero el Ministro Manuel Clavero Arévalo dió el famoso portazo a Suárez y dimitió como ministro para hacer propaganda a favor del referendum, era el ejemplo de una burguesía andaluza más ilustrada, aunque minoritaria. La Junta Preautonómica de Andalucía tenía mayoría de la izquierda, el PSOE de Andalucía, el PCA y el entonces PSA. La extrema derecha, la Unión Nacional, fue la única fuerza política que pidió el no.

La crisis del gobierno se agrava con esta división de su partido en Andalucía, a Clavero le apoyan Francisco Villodres y José Javier Rodríguez Alcaide desde Málaga y Antonio Delgado Jesús desde Córdoba (ver "Crónica de un Sueño, 1973-83"). ¿Quiénes se ponen de la mano de la reacción más derechista en Andalucía? pues entre otros el cordobés Cecilio Valverde, presidente del Senado y el gaditano José Pedro Pérez Llorca. Este último que ahora el presidente de la Diputación de Cádiz (¡del PP claro!) lo vaya a nombrar Hijo Predilecto (el próximo Día de la Provincia) se dedicó a poner piedrecitas en el camino de la autonomía, fue un verdadero enemigo del proceso autonomista andaluz, empezando por reducir la campaña del referendum a quince días, mientras que los de catalanes y vascos duraron tres semanas. Se retiró la financiación institucional para hacer propaganda y la tercera, que es la que ha resultado más recordada, porque pasará a los anales de la perversión del lenguaje, fue la dichosa preguntita, que nadie sabía qué quería decir:

la preguntita de este señor...

Como se ve en el texto no aparecían los términos "Andalucía" y "autonomía", como si se establecieron en Cataluña y el País Vasco. También en las anteriores consultas, el gobierno había permitido al Consejo General Vasco y al Presidente de la Generalidad de Cataluña aparecer en Televisión Española para defender su posición favorable a estatutos de autonomía, sin embargo al presi­dente de la Junta de Andalucía le fue denegado. El resultado fue una campaña de obstruccionismo institucional desde Madrid, el tiro le salió por la culata, el error histórico de la derecha fue tremendo, lo que hizo fue, sobre todo, fomentar algo que ha beneficiado desde entonces al PSOE, el ser considerado como un partido andaluz y casi andalucista. Esta apuesta de Felipe y Alfonso por el referendum sirvió para que los andaluces no necesitaran de los llamados andalucistas de Rojas Marcos que poco a poco se fueron diluyendo. El Gobierno y sobre todo la derecha andaluza quedó marcada para entonces con el estigma que hoy todavía tiene, de hecho es la única región del Estado donde no ha gobernado desde que existen los gobiernos autonómicos en esta región. Pero el referendum si que hizo un terrible daño a Andalucía porque los "centristas" de la UCD se dedicaron a meter el dedo en la yaga de la llamada Andalucía Oriental, fomentando un sentimiento de anti-sevillanismo en provincias alejadas, especialmente en Almería, donde siempre han tenido un gran éxito electoral. El problema es que la gente se olvida de estas cosas y hoy, como celebramos ese día, el 28-F, debemos recordar quienes nunca estuvieron con Andalucía, la derecha y por eso hoy pagan su calvario de la oposición por vida a gobernar esta región. Da igual que le den las medallas que quieran a este señor, muchos no nos olvidamos de cuando éramos casi unos adolescentes y salíamos a la calle a pedir "¡Andalucía, Autonomía!" y que entre ellos incluso hubo un joven que falleció por ello, el malagueño José Manuel García Caparrós, al que siempre le han escatimado su mérito y su recuerdo. ¡Andalucía libre, por España y la Humanidad!