Lily Tomlin está en boca de muchos por su extraordinario papel en “Grandma”, película donde personifica a una abuela lesbiana que debe ayudar a su nieta a someterse a un aborto. Genial en su interpretación, la destacada actriz de 76 años –que también participa en “Grace and Frankie” tiene una historia de amor que no pocos conocen.
Tomlin conoció a su futura esposa, la escritora Jane Wagner , en marzo de 1971. Desde entonces se hicieron inseparables y la prensa solía mencionar a Wagner como su compañera. Las revistas no sabían cómo abordar el tema en esa época, una decía que vivía sola y otra con su compañera. Ninguna de las dos quería que el romance saliera a la luz. Lo que más preocupaba era la mamá de Lily, una mujer cariñosa, pero muy conservadora. Le contó a The Guardian, que ella no quería enfrentarse a su madre.
Tomlin dijo en 2008 que en la industria todos sabían de su orientación sexual y de Jane, pero no era un tema que le importaba difundir.
El 31 de diciembre de 2013, Tomlin y Wagner casaron en una ceremonia privada en Los Angeles después de 42 años de relación. Ambas se involucraron siempre en producciones feministas y de temática LGBT.
Lily ahora tiene 76 años y su esposa 80 años. Van juntas por la vida, y son felices.
Entre 2015 y 2016, Lily ha visto resurgir su carrera gracias a “Grandma”. Y aunque se pensó que la nominarían al Oscar, esto no ocurrió. Muy al margen, ella se siente feliz con este papel que de alguna manera se identifica con sus luchas.
Entrevistada por The Guardian, comentó la salida del clóset de Ellen Page y las críticas en líneas que recibió. Lily dijo que lo mejor que puede hacer es seguir adelante y ser valiente. Lily tiene un hermano gay. “Mi madre era bastante tradicional. La mayoría de mis familiares también. Esa generación se horrorizaría, 20, hace 30 años, si les hubiera anunciado… Así que nunca lo hice”.
Fuentes: The Guardian y SinEtiquetas.org
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