La chica del tren que encandiló a la crítica

¡Vamos que nos vamos! Este veranito se está poniendo interesante con respecto a mis lecturas. Después de acabar Hijo Dorado, tenía que encontrar el sustituto perfecto, pero claro con tantos libros para escoger... Tenía claro que me apetecía probar otro género diferente, y cuando pasé delante de una columna (en el Hipercor de Almerimar, Almería, el cual considero que falta mucho material literario. Ahí lo dejo) y me topé, así de casualidad con La chica del tren, me dije, puede ser el elegido.
También os digo que no soy de las que se dejan llevar (normalmente) por los "piropos" (a veces excesivos) que colocan en la contraportada. Claramente este no fue el caso. No hablan de la trama, sólo había opiniones (en la contraportada) y eso me llamó la atención (me encanta cuando un pequeño detalle es suficiente para llamar tu atención), porque al igual que en el cine a veces es preferible entrar en una película de la que no has oído demasiado, ni siquiera un trailer que pueda destriparte la trama.
Así que me adentré en sus páginas y me catapultó de lleno en la historia. En un principio puede parecer poca coa, una trama de un asesinato es lo típico, no hay nada nuevo. Y en parte aunque así sea, supe desde el primer momento que tenía muchas papeletas para que me gustase. Y es que su lenguaje en primera persona es algo especial, no describe en exceso, es directo y sin darte cuenta ya llevas más de la mitad del libro leído.
No sólo es fácil leerlo, sino que Paula Hawkins sabe lo que se hace y te da un personaje de lo más antihéroe, una persona que es un auténtico desastre, que no tiene por qué gustarte o caerte bien, y a pesar de ello sigues leyendo.
Lo único que podía fallar por mi parte (soy muy tiquismiquis, lo sé) es que el final me resultó bastante obvio.
Sin embargo eso es una minucia. Os lo recomiendo, sobre todo si os gusta este tipo de género (thriller psicológico), e incluso como si no, que no está mal cambiar de vez en cuando.