La crisis de los dos años

Desde que nació Julito no he dejado de oír y leer que los peques pasan por varias etapas o crisis.
La angustia de separación a los 8 meses, total en mi caso.
Alrededor del año nosotros tuvimos la crisis del sueño, de dormirse julito en su cuna sin protestar (con método Estivill), en cuanto empezó a ponerse de pie en la cuna se fue al garete y comenzamos a dormirle de nuevo.
No recuerdo mas intermedias, pero ahora estamos en la crisis de los dos años.
He de decir que no se si es que Julito se va a salvar de las rabietas o que aun no ha llegado a ellas. No quiere decir que no tenga sus momentos de enfado, pero no pasan de eso momentos de enfado que se le pasan rápido. Rabietas tipo me tiro a patalear en medio de la calle aun no ha tenido.
Peeero en lo que estamos ahora es la etapa del No.
Al cabo del día la palabra mas usada por Julito es No.
- Vamos a cambiarte el culete: No, no
- ¿Quieres agua?: No, no
- Vamos a la calle, siéntate en la silla: No, no, mano. Mano que se convierten al segundo en brazos o bien porque el lo pide o bien porque quiere ir andando solo por la calle cual persona mayor, con lo cual vuelve al coche, entre lloros que se pasan al cabo de unos pocos minutos.
- Vamos a dormir: No, no
- ¿Quieres yogurt, galleta...?: No, no
- ¿Quieres a papa?: No, no, mama.
- ¿Quieres ir al colé?: No, no, No, no
Y así hasta el infinito.
Pensábamos que podía ser un efecto de la guardería pero ayer la tata que es maestra de Educación Infantil nos dijo que era la crisis de los años y que no le pasa solo a Julito, cosa que yo ya me imaginaba pero que papi no y que hizo que se quedase mas tranquilo.
La verdad es que de momento no nos podemos quejar mucho (me las monto mucho mas gordas cuando era bebe ), porque aunque si que hay veces que hay días que acabo agotada, la mayoría de las veces es por la mamitis acusada que tiene Julito que hace que no pueda hacer absolutamente nada sin unas manitas tirándome de la camiseta para que le coja en brazos.
Me quejo, hay veces que es tan agobiante que me quejo, pero se que algún día lo voy a echar muchísimo de menos.
Así que como dice mi madre cuando habla de la mamitis de mi hermano que ahora es un despegado de la leche, eso que me llevo¡¡¡