Revista Cine

La cura del bienestar – Más insípida que el agua

Publicado el 23 marzo 2017 por Maresssss @cineyear

Cuando te dispones a ver una película como La cura del bienestar, vas preparada para pasar un buen rato disfrutando de una superproducción de terror con toques fantásticos y tintes góticos modernos (cercanos al horror cósmico de Lovecraft), y más con el bombo que se le ha dado al film (tirando incluso de polémica con unas noticias falsas). Pero cuando sales de la película necesitas comprobar si lo que has visto es una locura sin pies ni cabeza o si la loca eres tú.

cura bienestar insípida aguaLa cura del bienestar – Más insípida que el agua

La premisa del film no es otra que aterrorizarte usando la naturaleza: el agua es, en fin, lo más natural del mundo. Y cuando sales de la película te lo piensas dos veces antes de darle un traguito al agua del grifo, eso se lo admito. Pero tras esta iniciativa de guion, pareciese que se hubieran perdido sobremanera a la hora de buscar tramas "espectaculares" con las que justificar esa premisa tan interesante. El film pierde el fondo por la forma, y aunque la estética otorga una belleza remarcable a la cinta, las historias son excesivamente planas y pobres.

Porque, sinceramente, La cura del bienestar, que conlleva la vuelta al terror de Gore Verbinski ( Piratas del caribe, La señal) es un producto que no sabes muy bien por donde coger al término del mismo. Un inicio oscuro, no extremadamente prometedor pero lleno de misterio y sucesos extraños, lleva a un desarrollo lento, confuso, repetitivo y en ocasiones ridículo, mezclado con lo que a partir de ahora denominaré porno-gore (el uso de recursos llamativos y violentos) que si bien son realmente efectistas y están bien rodados, te dejan fría y hasta preguntándote a cuento de qué te han colado ese momento extremo y poco sutil.

cura bienestar insípida agua
La cura del bienestar – Más insípida que el agua

Desgraciadamente, la película da la sensación de ser un quiero y no puedo de Shutter Island (sólo primas lejanas) de corte fantástico y oscurantista, y cuyo final deja mucho que desear: la película se hace larga y da la sensación de que va a finalizar cuando de repente le quedan 20 ó 30 minutos más (podría decirse que tiene tres finales). Además, parece que no tuvieran si quiera claro lo que querían contar con el film, tirando de tópicos sobre la vida del urbanita ambicioso contra lo bucólico y oscuro de la naturaleza alejada del mundanal ruido. << La cura del bienestar>> pareciese un juego de palabras en cuanto a los objetivos del malo del film: "cuidando" de la salud de los ricos que van al balneario, pero diluyendo su calidad de vida sin que estos sean conscientes. Hay cierta moraleja intentando discernir el bien del mal que se queda demasiado difusa: hasta para eso el film no funciona.

cura bienestar insípida agua
La cura del bienestar – Más insípida que el agua

Dane DeHaan, nuevo niño malo hollywoodiense al que casualmente comparan con DiCaprio, es el protagonista absoluto de este largometraje, a quien si bien le queda grande el peso de la trama (quizá el problema está en la elección de casting o en la dirección del actor), siempre se agradece en pantalla por su carisma y su actuación impecable. Lástima que ni él ni nadie ( Mia Goth y Jason Isaacs-eterno malvado- también cumplen) pudieran levantar una cinta bella por fuera (agua como recurso narrativo hipnótico) pero vacía por dentro (los personajes y sus tramas generan más indiferencia y apatía que otra cosa).

cura bienestar insípida agua
La cura del bienestar – Más insípida que el agua

Como recomendación personal, finalizo esta crítica advirtiendo al lector/espectador de que si valora dos horas y media de su vida y le apetece pasar algo de miedo tenebroso, mejor que ver La cura del bienestar se ponga films de bajo presupuesto pero de gran ingenio (o simplemente abra cualquier página de la Antología de relatos de terror de H.P. Lovecraft), pues le aseguro que se sentirá menos frustrado y más enriquecido. Y una pregunta que lanzo al aire de pura incomprensión: entendiendo que la finalidad era hacer una película espectacular y, a fin de cuentas, buena, ¿es que nadie era consciente del producto tan insípido que se estaba cocinando con tanto dinero?


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas