La desigualdad en el trabajo

La mayoría de las personas trabajamos para poder proporcionarnos aquelloque necesitamos para vivir.

Hay algunas que la actividad que desempeñan es para aquello que se han estado formando gran parte de su vida, otros se van formando en el trabajo mismo desde que comenzaron con total desconocimiento de él, y otros, los más diría yo trabajamos en lo único que hemos tenido oportunidad de encontrar la forma de pagarnos la vida, que no de ganarnos.

Dependerá del tipo de personas que seamos, de las ganas de aprender y de conocer el engrandecernos en el centro de trabajo que realicemos nuestra actividad.

Dicen que todos los trabajos son dignos, y tienen razón pero gran parte de la frase no radica en el trabajo en si, si no en como lo cataloguemos nosotros mismos.

Todos en esta sociedad somos necesarios, sea cual sea la actividad que desarrollemos, y si un colectivo de trabajadores desapareciese sin que nada ocupase su lugar, quedaría un vacío que haría cambiar el comportamiento social.

Aquellos trabajos que por su realización se cataloguen como de menor calidad o menor categoría son tan necesarios como el resto.

Ya nos encargamos de ponerle precio a cada uno de los colectivos que integramos la sociedad, teniendo sin embargo todos las mismas  necesidades.

Todos merecemos el mismo respeto trabajemos en lo que trabajemos, pues el respeto poco o nada tiene que ver con aquello que nos permite llevarnos un trozo de pan a la boca.

El respeto por lo que cada uno de nosotros realizamos para el buen funcionamiento de la sociedad en su conjunto es algo imprescindible para  que aquellas personas que se sienten poco o nada respetadas en este aspecto puedan ejercer su trabajo con dignidad y sin avergonzarse de ello, pues esto no lo da el trabajo sino las personas que ejercen otra actividad diferente y se sienten superiores.

Todo esto, seguramente que quien lo lea asentirá con su cabeza, a la vez que puede que piense “es justo” pero ¿Hacemos lo justo a este respecto?

No es fácil, pero nada fácil, todo es cuestión de tratar de ejercer con igualdad. Palabra esta que a pesar de los tiempos en los que nos movemos parece que es cada vez más difícil de poner en practica, que no de tenerla en la boca continuamente y si difícil es mirar a las personas de otro color de piel al nuestro. igual, mucho más difícil es tratar a alguien que se nos antoja inferiores por el trabajo que hacen, igual que a otro colega nuestro o como nos gusta que nos traten a nosotros mismos.

¿Que hace que miremos a las personas con desigualdad? ¿La actividad que desarrollan o colectivo al que pertenezcan,o bien enel poder adquisitivo que estas puedan tener?

Es obvio que la desigualdad está en base a que quien la ejerce se siente superior a la persona que vemos como desigual, sin pararnos a pensar que siemprepuede haber alguien que se sienta superior a nosotros…

A riesgo de equivocarme diría que hacemos distinciones y ejercemos la desigualdad en base al dinero.

Las personas venidas de otros Países a trabajar al nuestro, son miradas con recelo por verlas como intrusos que amenazan los puestos de trabajo que creemos tener derecho a ellos por ser originales del País, sin embargo si estas mismas personas se dedican a trabajar en Jugar al futbol ( por ejemplo) Tendrá toda nuestra admiración y respetaremos, dependiendo de la empresa o equipo en la que trabaje, no le admiraremos solamente por como hace su trabajo que muchas personas pueden no entender dicho juego, sino por la fama que le ha dado el equipo donde juega y en consecuencia el poder adquisitivo que tiene.

Con esta reflexión podemos llegar a la conclusión de que también damos más importancia a unos trabajos que a otros y en consecuencia a los trabajadores de los mismos, cuando el esfuerzo al realizar dicho trabajo sea el mismo y con el mismo fin.

Sin embargo si un dependiente trabaja en las mejores firmas y otro en un comercio de barrio desconocido para una gran mayoría, no haremos distinciones ¿por qué? Pues porque el oficio de dependiente, sea en donde sea tienen todo el mismo poder adquisitivo y por ello el mismo estatus social, solo inmerso en un gran grado de ignorancia el mismo trabajador de aquella firma importante se sentirá superior al del comercio de “ Modas Merceditas”