La diputada Juliana Di Tullio cruzó todos los límites imaginables

El último fin de semana, en una teleconferencia con un partido de la provincia de Buenos Aires, la presidente, Cristina Kirchner, mantuvo un diálogo con la diputada Juliana Di Tullio.
Di Tullio es jefa del bloque del Frente para la Victoria en la cámara baja. Su mandato termina este año y va por su reelección, segunda en la lista que lidera Martín Insaurralde.
Durante el intercambio entre la primera mandataria y la legisladora nacional, esta última apeló a un recurso de muy mal gusto. No tuvo mejor idea que exponer a un niño discapacitado a elogiar a la señora de Kirchner y a cantarle una canción que recuerda a su difunto esposo.
Dicho sea de paso, el pequeño resaltó que veía a la presidente todos los días en la televisión. Segundos después, la jefa del Estado dijo textualmente “la puta madre¨.
No hace falta aclarar sobre el abuso de los medios audiovisuales que realiza titular del Ejecutivo.
Creo que la diputada Di Tullio cruzó todos los límites imaginables a la hora de hacer política. Jamás votaría a alguien que aprovecha situaciones como éstas.
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