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La Fragata Libertinaje

Publicado el 09 enero 2013 por Plple @PLPLE

Libertino: Persona que malgasta su fortuna, generalmente heredada, en diversiones y placeres para sí. Suele adquirir deudas impagables cuando dilapida su patrimonio, e incurre en crecientes peleas a medida que sus fondos disminuyen. No tiene respeto ni consideración por otros, y suele ser descreído y nihilista. También es conocido como “petimetre”, “dandy”, “playboy” e históricamente se le dió el nombre de “depravado”.

La odisea de la Fragata ARA Libertad Q-2 (más conocida como Fragata Libertad), no hizo más que demostrar cómo se maneja el gobierno de Cristina Kirchner en, virtualmente, todos los ámbitos que le competen (y también en los que no). Pero no sólo nos dejó esa estela histórica sobre ella, sino que también nos dejó una gran enseñanza sobre la Argentina toda.

La explosión se inició cuando los “fondos buitre” (dueños de bonos vendidos por el gobierno de turno para salir de deudas que nos dejaron otros gobiernos de turno) retuvieron la Fragata en Ghana, país africano tercermundista con menor tasa de inflación y corrupción que Argentina. Aquellos “bonistas salvadores que creyeron en el país”, se convirtieron en “conglomerados capitalistas de plumaje negro” al momento del cobro. Pero para Cristina todo es así: si pagás, sos Dios; si reclamás, te hace el pagadios.

Doña Fernández convirtió el tema en una causa de epicúrea lucha patriótica contra la “inembargable fragata”, pero olvidando que su mismo esposo había firmado un convenio internacional que le quitaba dicha inembargabilidad de patrimonio histórico a esa mismísima fragatucha, que desde entonces podía ser rematada y canjeada por fichas para el casino kirchnerista. Mientras ese (ex)46% de votantes pro-Patria y pro-futuro realmente se indignaba por lo ocurrido, el resto encontraba otra razón para enarbolar otra banderita política en defensa de la Presidente Heroína vs. el Mundo Malvado. Pero los “pibes para la liberación”, paradójicamente, se quedaron sentaditos viendo a la Fragata Esclava por TV, y moviéndose sólo en Twitter y en choripaneadas gubernamentales. Supongo que en la jerga camporista, “la liberación” sería “los aplausos funcionales en actos oficiales”.

La Fragata Libertinaje

Pero tampoco es que le cayó el sapo del cielo: ella, la Capitán Piluso del Siglo XXI, sabía que eso podía suceder. Desde hacía un tiempo, algunos aviones oficiales evadían ciertos países por temor a un embargo (por deudas que ELLA dice que ÉL liquidó), y ni siquiera el mismo aviso de Cancillería sobre la posibilidad de una retención judicial de la Fragata la hizo recapacitar. De hecho, hasta su propia mesa chica le sugirió que encallara en Ghana (no estaba en los planes oficiales del navío). Si uno conociera al kirchnerismo, casi se podría decir que como movimiento adrede, les salió bárbaro; las gestas populistas siempre tapan cagadas magnánimas.

El juez Griesa impone una fianza de 10 millones de dólares (que luego aumentaría), como garantía para el pago de la deuda que ya debería haberse liquidado, pero que parece que se gastó en planes sociales para la inclusión humanista de chorros y asesinos en las calles de la sociedad. La oposición, siempre atenta y alerta según patrones delaruístas, comienza una “colecta patriótica” para ayudar “a recuperar lo nuestro”. Lejos de criticar el por qué se incautó ese bien, y pasar facturas a los culpables en la cima de la colina, la mejor idea es hacer una vaquita para ver si se llega a soltar, si se llega. Y, curiosamente, la plata se la pedían a la misma gente a la que le habían birlado un patrimonio nacional. Un lado te la deja robar, y el otro lado te cobra… Nunca lenta de reflejos, la Presidenta tiró el timón sobre la opo, diciendo “si quieren hacer una colecta, que la hagan para la gente que no tiene gas, agua, o cloacas, que son muchos en este país”, sin darse cuenta que todos sus reflejos son traicioneros y autolesionantes, aceptando al vuelo que hay mucha pobreza y necesidades insatisfechas en ese extraño país cuartomundista que debe estar manejando Menem o los militares. O sea, las dos divisiones que supuestamente nos representan, demostraron ser completamente idiotas e inútiles. Pero lo bueno es que podemos elegir entre la que tiene “el palo ese” que le prestó el marido, o bien a los otros que quieren tenerlo.

La Presidenta se hizo la abnegada luchadora nacionalista de la misma Patria que le vende a la Barrick Gold y a otras multinacionales, y lanzó un “acá no se paga” con el mismo tono y convencimiento de Moreno cuando veta el voto en las juntas de accionistas de empresas privadas (cambiando el “paga” por el “vota”), haciendo cuentas de cuánto podría comprar en Louis Vuitton con ese ahorro. Lo extraño del caso es que si uno suma todos los gastos que demandó el caso (idas y venidas de funcionarios, costos de atraco en puerto, manutención de los marinos, etc), dan más de los 10 millones que le pedían por la liberación (el kirchnerismo hasta en las negociaciones dá pena…). La primer mandataria lanza entonces una frase que sería ampliamente criticada (y recordada): “podrán quedarse con la fragata, pero nunca se quedarán con la libertad”. Así, no sólo demostraba su poco interés real sobre la misma fragatucha que su marido había entregado en bandeja por un puñado de dólares, sino también la aparente falta de ciudadanía e importancia de todos los marinos que se quedaron varados en la misma fragata quedable, y la poca potestad que tenía el Pueblo sobre sus propios patrimonios históricos. La facción más vulgar del país aplaudió hasta sangrar palmas, mientras el resto veía un nuevo paso en la desargentinización de la Argentina.

La Fragata Libertinaje

El gobierno mete recursos, amparos, pedidos, y rezos a cuanto funcionario foráneo se cruzase, sin importar si tenían actuación o no en el caso. Pero la burocracia sin tino era el único movimiento que hacían, mientras los marinos olvidados y expropiables tenían que defender por las armas ese pedazo de tierra y de Patria que tenían como único hábitat, ante cada avance ghanés. La corpo mediátiK puja por sus múltiples medios la idea de la expropiación sólo por ser buenos, pacíficos y chavistas. Mucha gente compra la propaganda hitleriana y se une a la causa épica del David pobre y argentino, contra el Goliath con patrimonio en dólares y antimalvinense, y se suma aunque sea antivaciamiento. Muy pocos entendieron lo que había detrás de la gesta, y aportaron su dosis de patriotismo en liquidación por temporada, que sirvió para tapar la fuga de pesos del Banco Central o los saqueos que dejaron más muertos que los que sacaron en el 2001 al creador de la dinámica opositora actual.

Finalmente, alguien le da bola a la viuda de negro que grita todo el día y caga a pedos a estudiantes harvardianos, y que comanda un país “de esos que están por abajo, pero no crecen”, y ordenan soltar la fragata. No porque le temieran a una mandataria que posee armas de piquetes masivos, o porque los bonistas no tuvieran derecho a cobro, sino porque iban a recibir más dinero que los que se sumaron al canje de bonos por papel higiénico hecho en La Matanza (¡en La Matanza che!), y podía sentar precedentes a nivel mundial. La Presidenta no lo vió así, y dijo que se la devolvieron porque con la Argentina de la igualdad de deshechos no se jode, y porque we are de champions. La causa de la fragata se convirtió, entonces, en la victoria virtual de la consecución de mundiales de fútbol no ganados; y de pronto, el navío que antes no era equiparable con la libertad y podía reducirse a papel moneda, ahora era una pedazo de Patria, de Razón, de Estado, de Pueblo, y de ella misma. Y todo dedicado a ÉL, el innombrable. Como Lord Voldemort.

Que la fragata viene, pero no venía. Escollos, y sale otra vez, pero sin salir. Ya emprendió el regreso, pero varada en el puerto. Unos días después sale “denserio”, y comienza el largo recorrido que será cuidadosamente trazado. No sea cosa que otra vez toquen otro puerto antisolidario y se tenga que empezar otra gesta épica de otros 60 días… Hasta publican el GPS de la Fragata Libertad, para que pueda seguirse por internet en cualquier momento del día. Pero lejos ya de culminar la travesía, casi comienza otra paralela.

Cristina Capitana

Se organiza en Mar Del Plata una fiesta por la recuperación de algo así como la Patria canjeable. Allí se prepara un megafest en donde sólo tocará la DJ Cristina. No sea cosa que se escuche algún otro remix que desentone con el ánimo guevarista tan de moda. Se pone como fecha de llegada al puerto, el día miércoles 9 de Enero. Se preparan escenarios, torres de sonido, y se ordena cerrar el puerto al público, para que sólo los integrantes de la Patria Kirchnerista puedan asistir a tan memorable evento que compete a 44 millones que conforman la Patria Real. La seguridad fue lo segundo que se planeó, más sabiendo que muchos inconformistas destituyentes, golpistas, fachos, nazis, y abuelos de la recalcitrante derecha caranchera, también planeaban un cacerolazo fuera del puerto en desacuerdo con el modelo de recuperación de objetos olvidados a propósito.

La misma Presidenta que entrega netbooks a los alumnos y hace videoconferencias para adoctrinar Salustrianas, parece que falla en otros aspectos tecnológicos, y piensa que los chips van a creerse las mentiras populistas que sostienen al modelo. Y la tuvo que deschavar el mismo GPS que ella misma publicitó.

Como la Fragata parece que venía muy apurada siendo perseguida por buitres, caranchos, y orcas antipinguinos, llegaba muchísimo antes de lo esperado. Toda la cúpula K se puso a hacer matemática ligera (se necesitaban una decena de neuronas y muchos deditos para contar, por eso semejante convocatoria) y cayeron en la cuenta de que el navío llegaría el domingo al mediodía. La orden entonces fue que se quedasen en una isla de Brasil un par de días, que no había problemas porque la Presi de ahí era gomía y jermu. Los marinos, con casi 100 días sin tocar tierra nacional ni ver a su familia (y alguno, hasta sin conocer nuevos hijos), tuvieron que sufrir una nueva traba, paradójicamente, de un gobierno populista, patriota y familiero. Lo único que pudieron agradecer, fue que por lo menos esa “estadía forzoza” les tocó en un lugar mucho más amigable y disfrutable que el anterior.

La Fragata vuelve a zarpar con destino marplatense. Pero como la cúpula que debatió e hizo cuentas en la reunión anterior, no llegó al quórum de 10 neuronas (es difícil, entiéndanlos), otra vez volvieron a pifiar con las matemáticas infantiles, y notaron que de todas formas estaría llegando un día antes de lo esperado. El martes 8 mismo, el rastreo por GPS de la mañana daba una posición mucho más cercana a las costas argentinas, que el rastreo hecho por la tarde. Efectivamente, la Fragata había retrocedido. Algún avezado fotógrafo que vió el GPS, sacó una foto con lente desde la costa, y documentó que el navío tan esperado, estaba parado allí en el horizonte, solo, solísimo, casi tan aislado como en Ghana.

La Fragata Libertinaje

Lo malo de tener un líder pseudofascista, es que él es el más importante, y todos los demás no sólo deben hacer caso a todo lo que se diga, sino que deben esperar por él. Con Cristina, nunca menos. Si la Fragata llegó antes, que espere a la Presidenta y su fiestita con globitos; inaudito que ella sea la que tenga que apurarse, porque por algo también la esperan todos los mandatarios de la ONU o los distintos presidentes de otros países. ELLA es lo más importante, y lo demás corre bajo sus inconcebibles e inescrutables caprichos. Y es por ello que la Fragata tuvo que esperar en el mismo lugar, más de 24 horas. Bueno, “casi” en el mismo lugar, porque cuando la embarcación se llegó a ver a simple vista, se le ordenó retroceder a 9 millas náuticas para que se convirtiese en “sensación de Fragata”, y no en una realidad. Porque si no se ve (o no lo mide el Indec), no existe. Otra muestra más de que la Fragata y su tripulación, importan menos que nada; lo único que mueve al kirchnerismo, son las fiestas que se hacen en su propio honor.

La Fragata Libertinaje

La congregación invitada, tampoco se escapó del libreto cristinista. Rápidamente se juntaron micros en las puertas de las unidades básicas funcionales (La Cámpora, Kolina, Unidos y Organizados, JP Descamisados, MILES de D´Elía, etc.), pero también en las instituciones funcionales (Indec, Correo Argentino, Aerolíneas, etc.). Muchos, hasta publicitando “dos días gratis en Mardel y $200 en mano” para agregar asistencia. Por supuesto, cada agrupación con su bandera identificatoria, no sea que todos pareciesen argentinos contentos con el regreso de un navío histórico, y no militantes alabando el discurso playero de la amiga del alto guiso. Y por eso mismo, ni una sola de las banderas K dice algo sobre la Fragata o sus ocupantes. Ya desde el martes partían los “micros espontáneos” rumbo a la costa, y hasta las 16 horas del mismo miércoles, todos los “pibes del modelo” estaban a plena playa y mar, mientras un grupo de marinos se asaba, aislada y depresivamente, bajo el sol abrasador de ultramar, sobre un limitado barco histórico que parecía importarle sólo a una minoría del país.

Algo que entregadora/libertadora olvidó adrede, fue a los propios familiares de los marinos. El planeamiento de los micros populistas ya se había realizado días antes de que la fragata hiciese puerto, casi al momento de la concepción del acto mismo. Pero a los familiares, ni señales de nada. No sólo les movieron el puerto a uno a 400 kilómetros de distancia (recordemos que los de aquí son públicos, pero el de Mar Del Plata no lo es, o sea que no podían asistir los que Cristina no señalase con “el palo ese”), sino que los que no podían pagarse un pasaje hasta allí, se perdían el “vení a nuestra fiestita K”, junto al contacto con un familiar embarcado hacía más de 3 meses. Se hizo la sota hasta un día antes, cuando anunció, a última hora, que habría micros disponibles para los familiares que “todavía no habían viajado”. Los que sacrificaron ahorros o comida para viajar, que se jodan por ansiosos. Dichos micros salían a las 9 AM y llegaban a las 4 PM, no fuera cosa que los familiares de “milicos” le cagasen la playa a los pobres inadaptados pichones de Montoneros.

La Fragata Libertinaje

Y así, llegamos a ver cómo se maneja y se trata todo en éste país. Los pocos valores que quedaban en pie, han sido dejados de lado para abrir paso al circo populista a costa de, básicamente, cualquier cosa. No importan ni siquiera los patrimonios nacionales, ni la gente que los maneja y los defiende por un magro sueldo sin paritarias ni sindicato. Pero si no importaron ni los muertos de Once, ¿por qué iba a ser distinto con un grupo de milicos que manejaban algo que es de ELLA, y no de todos?

La Fragata Libertinaje zarpó hace rato al mando de la Capitana Jack Sparrow, tratando de renombrar la embarcación a Perla Negra Internacional, un título más que bien ganado a fuerza de tortazos a la historia, al honor, a los valores, y a la lógica. Y una conducción que 44 millones de piratas, seguimos dejando que suceda. Aplaudiendo a babor, o repudiando a estribor, la Jack Sparrow sigue allí, navegando por mares cada vez más tormentosos y peligrosos, dispuestos a acabar con toda la fragata de un momento a otro. Pero todos los piratas siguen prefiriendo esos azares de la Capitana caprichosa, antes que pasar por un motín, que ya promete ser menos peligroso y dañino que unos meses más de timonel irresponsable y libertino. Sigamos así, que vamos bárbaro hacia el iceberg.

PLPLE


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