Revista Cuba

La Habana: No más paladares hasta nuevo aviso

Publicado el 18 octubre 2016 por Yusnaby Pérez @yusnaby
vistamar-havana-sign

A estas alturas del 2016 creemos que Lenin se quedó corto con aquello de “Un paso adelante, dos para atrás” en alusión al Socialismo, el más enfermo de los istmos del siglo XX y lo que va del XXI.

Un paso adelante y muchos para atrás dirán los mal llamados emprendedores cubanos, a quienes les resulta más difícil cada vez emprender negocio propio y quitarse los grilletes del régimen.

Ahora resulta que molestaron los paladares. La culpa la deben tener Obama y las celebridades por irse a comer en paladares y no en las unidades gastronómicas de la Empresa Socialista.

La medida se veía venir desde hace semanas, cuando de manera injustificada comenzaron controles exagerados sobre los paladares en varias partes de la isla, los cuales propinaron cierres, encarcelaciones, cancelaciones y toda suerte de chantajes.

Chantajes es la palabra pues los paladares desde su nacimiento han sobrevivido de manera independiente mediando con la inescrupulosidad de inspectores y dirigentes locales. Jamás han contado con una estructura que los ordene y les permita convivir y competir de tú a tú con las entidades estatales.

Hasta el día de hoy los paladares no disponen de un aparato suinistrador mayorista que les permita tener estabilidad en los insumos y productos y bajar los precios sin tener que competir con los consumidores minoristas que se apilonan en las largas filas de la escasez.

Ahora es el gobierno de La Habana quien suspende temporalmente la expedición de licencias para nuevos restaurantes, al parecer sin entender que entre más paladares estén abiertos, mayor será la competencia, creatividad y expansión de los servicios que obligarán a los dueños a bajar incluso los precios.

Pero no, no se entiende de esa manera, y a fuerza de ser tan estrictos no se comprende que cuando se elimita la apertura de nuevos restaurantes o paladares lo que se logra es incrementar el nivel de ingresos de los que sobrevivan.

La medida no se dispone en un momento cualquiera, se aplica justamente en el momento en el que se esperan cifras récords en visitas de turistas americanos y europeos como parte de la temporada alta.

Esta es una señal negativa. Es el indicativo real de que el régimen no se abre por completo a la pequeña empresa como muchos creían. Recordemos que igual ha sucedido con una serie de medidas tomadas hace un año con la agricultura a las que se le ha dado marcha atrás como mismo ha ocurrido con los controles impuestos en los precios sobre los servicios de transporte privado.

Muchos expertos dentro y fuera de Cuba consideran que la presión fiscal sobre estas pequeñas empresas es inmoral.

Con iformación de EFE.

¿Qué Opinas?


Volver a la Portada de Logo Paperblog