La parte social del sueño de los niños

Lo del sueño de los niños tiene también su componente social. Los niños duermen porque el descanso es esencial para los mamíferos y eso incluye a los papás….

Meter (en otros sitios dicen poner) los niños en la cama es un ejercicio parental diario de enorme significado social. Conviene utilizar el ritual que cada uno estime oportuno porque ayuda a superar los moentos de angustia de separación que acompañan el sueño nocturno. Dormimos de noche porque disminuyen los estímulos. Pero la oscuridad yel silencio inducen a las espíritus más inmaduros, como los de los niños, a entender que se acaba el mundo a su alrededor y, naturalmente, pueden resistirse.

La consistencia en el ritual de llevar los niños a la cama. Es mejor no dejar demasiado a la imaginación y no siempre es una buena idea usar un cuento o relato que pueda estimularla inncesariamente. Para las familias con creencias religiosas, el rezo es un recurso aceptable. Como puede serlo para las demás la invocación a otras realidades, sean los astros, el sol, la luna o los personajes del entorno mejor queridos. En cualquier caso es muy importante hacer ver a los niños pequeños que irse a dormir es un asunto suyo para el que no tienen porqué necesitar ayuda.

Las ayudas de objetos de trasferencia como mantitas o peluches tiene su utilidad, aunque hay que lavarlos de vez en cuando pues suelen acumular suciedad y residuos que, si bien pueden mantener olores que los hagan más próximos, no dejan de ser un reto a la higiene.

Las familias que puedan permitírselo deben procurar que los niños duerman solos en un estancia propia y cuanto antes mejor. Pero también es cierto que eso no es siempre posible en muchos ámbitos.

Desde aquí queremos mostrar nuestra reticencia al recientemente popularizado “colecho”, en aras del fomento de la lactancia materna. Entendemos que no es necesario ni para la lactancia ni para la relación madre-niño. Y todavía recordamos lo que motivó el famoso juicio de Salomón (La Biblia: I Reyes, 3, 19): la asfixia de un lactante durante el sueño de su madre. En nuestra experiencia personal sólo hemos conocido un caso que, además, no pudo ser atribuído a una muerte súbita. Pero no queremos ver ninguno más.

Nos preocupa la utilización de los niños  y su sueño para modular o controlar los avances o propuestas sexuales de la pareja en el lecho, porque nos preocupa cualquier utilización de los niños para cualquier cosa. Y por eso lo rechazamos. Pero luego que cada cual haga lo que estime oportuno porque no es tarea de este blog meterse debajo de las sábanas de nadie, como tan a menudo y lamentablemente hacen los clérigos.

Igual que el inicio del sueño tiene componentes sociales, los tiene despertarse. Un buen despertar puede condicionar todo el día tanto a los adultos como a los niños. Ahí también juegan su papel los rituales, tanto mejor si se acompañan de algun ejercicio higiénico como lavarse la cara y las manos y hacer deposiciones (en ese orden o el inverso). Incluso es conveniente diferenciar los despertares de los días laborables de los festivos.

Un poquito de atención es lo mejor que podemos hacer por el sueño de los niños.

X. Allué (Editor)