La sensibilidad dental

Si tus dientes se estremecen o te duelen al contacto con bebidas y comidas frías o calientes, es síntoma inequívoco de que padeces sensibilidad dental. Existen muchas personas que sufren este problema y algunas desconocen lo que le sucede.

Cuando tus dientes sufren de sensibilidad, los extremos de temperatura se multiplican. También puedes notar esta sensación al cepillar tus dientes o usar hilo dental.

Por norma general, nuestros dientes están protegido y no sufren de hipersensibilidad. La corona de los dientes está cubierta por el esmalte, así como el cemento dental protege la raíz y las encías la cubren. Pero en ocasiones esa protección desaparece y la dentina (situada bajo el esmalte y el cemento) sufre directamente las sensaciones externas y ésta las transmite al nervio y ahí es cuando aparece el dolor.

Existen muchas causas por las que los dientes se vuelven sensibles. No llevar una correcta higiene, el sarro y la edad van desgastando el esmalte. Esto también ocurre cuando te fracturas un diente. Y la causa más común es por la retracción de las encías que dejan la raíz al descubierto o al desarrollar una enfermedad de las encías como puede ser la gingivitis que hace que las encías se inflamen y con el paso del tiempo se destruyan sus tejidos haciendo que se despegue del diente.

Existen tratamientos para la sensibilidad dental. La forma más sencilla y económica es usar una pasta dental específica para dientes sensibles. Su función será cubrir tus dientes con sustancias bloqueadoras de la transmisión de sensaciones al nervio. El efecto no es inmediato, se requiere un uso constante y continuado de la misma.

En caso de que la pasta dentífrica no sea suficiente, acude a tu dentista para que te recomiende otros tratamientos.
Si el problema es debido al desgaste del esmalte dental, el gel de fluoruro lo fortalecerá y reducirá la transmisión de sensaciones al nervio. Si por lo contrario tu problema es debido a la retracción de las encías, tu dentista podrá aplicarte un sellador que une la encía a la raíz del diente.

Si finalmente ningún tratamiento te ha surtido efecto, es posible que el problema esté en la raíz de tus dientes. En dicho caso necesitarás realizarte una endodoncia, aunque dicha causa es la menos común.

Debes saber que la sensibilidad dental tiene diversas soluciones y cuanto antes conozcas el problema y lo trates, mejor.