La técnica del repujado sobre plata.

Todo comienza con un papel vegetal donde el artista orfebre dibuja la figura u ornamente que va a pasar más tarde a la lámina de plata. Esta técnica requiere de una gran habilidad y grandes dotes artísticas para el dibujo. El repujado es una de las técnicas más antiguas que se ha desarrollado limitadamente con el paso del tiempo, manteniendo su esencia hasta nuestros días. El repujado en sí, es una artesanía que se ha trasladado a distintos oficios como el del orfebre o el curtidor.

Herramientas de orfebre del siglo V o VI Por James Steakley (Trabajo propio) [CC-BY-SA-3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0) undefined GFDL (http://www.gnu.org/copyleft/fdl.html)], undefined

Como comentamos, todo comienza con el dibujo realizado sobre papel y que coloca en la parte posterior de la lámina de plata, seguidamente el artesano va marcando con buriles de distinto tamaño las líneas maestras del dibujo a base de golpes de distinta intensidad dependiendo de la intensidad de las líneas que se desean trasladar a la plata. El buril, es el gran aliado del artista junto con el martillo; el buril es un cincel con punta de distintas formas, roma, redonda o plana, que junto con el martillo de punta plana y cabeza cuadrada en el otro extremo son los elementos más utilizados para repujar la plata.

Una vez trasladadas las líneas maestras del dibujo, la lámina de plata se calienta y se comienza a trabajar en la masa de pez, que no es otra cosa que un recipiente con una mezcla de brea que dada su maleabilidad cede ante los golpes continuos que se practican sobre la lámina de plata con los buriles y el martillo, de esta forma la lámina se va moldeando y aparece en ella la figura que el artista repuja.

La técnica del repujado, por Fundación Joaquín Díaz (Trabajo propio – pa0049.jpg) [CC-BY-SA-3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0)], undefined

Durante el proceso de trabajo en caliente, el orfebre tiene que recalentar tantas veces como sea necesaria la lámina de plata y golpear de forma continua unas veces ayudado con el martillo y otras solo con la mano hasta conseguir trasladar a la lámina el dibujo. La destreza, habilidad y rapidez en el golpeo son determinantes para obtener el resultado deseado.

Arqueta en madera de nogal y plata repujada.

El repujado es por tanto una técnica que requiere una gran dosis de habilidad y paciencia como suele ser habitual en el trabajo artesanal, llegando a tardar semanas en rematar una pieza que contenga varios trabajos de repujado.