La teleasistencia un instrumento de suma importancia para el cuidado de nuestros mayores

Según los datos elaborados por el IMSERSO, la población española mayor de 65 años ya supera los 8 millones de personas y la cifra va en aumento debido al aumento de la esperanza de vida, la mejora en la calidad asistencial y la caída de la inmigración. 
De esta cifra, algo más del 21% de estas personas viven solos en casa, quiere decir que cerca de 1.700.000 españoles de más de 65 años viven solos en sus hogares. Cada vez se tiende a que las personas mayores aun teniendo hijos y familiares residan solas en sus casas reduciéndose a marchas forzadas el concepto de hogar con personas mayores que viven con sus hijos y nietos. 
Los expertos vaticinan que en 2030 uno de cada tres hogares lo habitará solo una persona. Es en este contexto en el que el uso de la teleasistencia se convierte en un recurso inapreciable para las personas de avanzada edad ya que les ayuda a mejorar su calidad de vida y les permite superar situaciones de emergencia o combatir la sensación de soledad que padecen muchos de nuestros mayores. 
La tecnología es el mejor aliado para muchas personas ya que les permite permanecer en sus hogares habituales con su rutina diaria. Avanzamos hacia la generalización de servicios como la teleasistencia domiciliaria o incluso la móvil que tiene la ventaja de poder ser utilizada fuera de la residencia habitual. 
Somos una sociedad cada vez más envejecida en el que dentro de unas décadas uno de cada tres españoles tendrá más de 65 años y en el que preferimos mantener nuestra autonomía y un estilo de vida independiente pero seguro. 
La teleasistencia se está convirtiendo en un recurso inapreciable al que aún le queda mucho recorrido gracias a su necesaria digitalización, la teleasistencia es sin duda, un instrumento de suma importancia para el cuidado de nuestros mayores