Revista Economía

Las claves del nuevo plan estratégico de Banco Sabadell

Publicado el 29 enero 2014 por Quim @Quim_Marques
 Josep Oliu, presidente del Banco Sabadell, en la presentación de resultados 2013 de la entidad, explicó que ya tenía diseñado el nuevo plan estratégico (2014-2016) del grupo financiero catalán, denominado TRIPLE, y avanzó que se realizará un gran acto público de presentación el próximo 11 de febrero, en la city londinense delante de la flor y nata mundial de los analistas internacionales.Las claves fundamentales de Triple consisten en focalizar todos los esfuerzos de los cerca de 17 empleados en triplicar la rentabilidad de tal manera que si en 2013 el grupo consiguió casi 248 millones de euros de beneficio neto, la intención del equipo del consejero delegado , Jaime Guardiola, es superar los 900 millones al cierre de 2016.
Para ello, toda la maquinaria del front office de la entidad se dirigirá a conseguir extraer más valor de cada uno de los 6,5 millones  de clientes. La apuesta del anterior plan estratégico, CREA, consistió en una apuesta por el crecimiento, orgánico e inorgánico, de tal manera que cada semana las distintas enseñas del grupo captaban cerca de 9.000 nuevos clientes por semana hasta conseguir duplicar el número de clientes (3,2 millones en 2010).
La denominación Triple es una conceptualización de Miguel Montes, director general del Sabadell, que se basó en las iniciales de los tres ejes principales del plan: transformación, rentabilidad e Internacionalición siendo el más importante el segundo.
Esta multiplicación por tres de la rentabilidad en el trienio se concreta en unos objetivos financieros más concretos como son: conseguir hacer crecer el ROE (return on equity) a doble dígito; obtener un Core Tier I superior al 10%, con criterios de Basilea III; un ratio de eficiencia del 40%; y una ratio LTD (loan to deposit) del 100% (fue de 107 en 2013 y de 122 al cierre de 2012).
El eje de la Transformación se notará sobre todo en un cambio del modelo de producción que afectará al ámbito comercial (oficinas), y una evolución sustancial del balance.
El tercer eje, la Internacionalización, será el que evolucionará de manera más pausada ya que Oliu quiere focalizar los esfuerzos en el mercado doméstico. De todas maneras, en el trienio se han de sentar las bases para el proceso de internacionalización que previsiblemente será uno de los objetivos del banco en la segunda parte de esta década. Para ello se está planeando la entrada en nuevos mercados, como México, pero de manera muy escalonada.
La intención del equipo directivo es que este importante crecimiento en resultados se refleje paralelamente en un aumento del dividendo. La política de pay-out (en torno al 50% del beneficio) continuará siendo similar en los próximos tres años por lo que el dividendo también debería triplicarse al final del período.Por último, para Oliu la evolución más incierta de precisar se sitúa en relación a la cotización de la acción que cerró 2013 rozando los 1,9 euros. La previsión de la entidad es que en 2016 este valor debería rondar los cuatro euros lo cual reflejaría, según ellos, el valor real.

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