Revista Cultura y Ocio

Las confesiones de San Agustín Libro VII

Por Jossorio
Las confesiones de San Agustín Libro VIIEl difunto era ahora mi juventud malvada y abominable, y yo estaba pasando a la madurez temprana; cuanto más contaminado estaba por las cosas vanas a medida que crecía en años, que no podía imaginar ninguna sustancia, pero que no se puede ver con estos ojos. No pensé en Ti, oh Dios, bajo la figura de un cuerpo humano; desde que comencé a escuchar sabiduría, siempre evité esto; y se regocijó de haber encontrado lo mismo en la fe de nuestra madre espiritual, Tu Iglesia Católica. Pero qué más concebir de Ti no lo sabía. Y yo, un hombre, y un hombre así, intenté concebir de ti el soberano, único, verdadero Dios; y lo hice en lo más íntimo de mi alma; creo que eras incorruptible e inmutable e inmutable; porque aunque no sabía de dónde ni cómo, sin embargo, vi claramente, y estaba seguro, que lo que puede ser corrompido debe ser inferior al que no puede; lo que no se puede herir, preferí sin vacilar lo que podría recibir daño; lo inmutable a cosas sujetas a cambio. LEER MÁS »

Volver a la Portada de Logo Paperblog