Lea Davies

La profesora británica, o monitora, o lo que fuese, es condenada por acostarse con un muchacho de quince años existiendo consentimiento por ambas partes. En España la edad legal de dicho consentimiento se reduce hasta los trece años, algo de lo que ya se habló en este espacio. O sea que en nuestro país la condena a esta mujer, joven por otro lado aunque casi le doblase la edad al muchacho, no hubiese sido posible. Cuando nuestro gran poeta Antonio Machado contrajo matrimonio con Dª Leonor, contaba ésta catorce años de edad, uno más que la necesaria para el consentimiento sexual a día de hoy en este país, y uno menos que el muchacho británico a quien no se preguntó, que yo sepa, si estaba de acuerdo, o no, con la relación sostenida. Es imprescindible la persecución y condena de violadores, maltratadores y de todo aquel que atente en alguna forma contra cualquier tipo de libertad, sexual incluida, pero condenar a prisión a una mujer por sostener relaciones con un joven de quince años, existiendo consentimiento por ambas partes, parece cuando menos, un poco excesivo. Que éticamente se entienda mal no ha de significar necesariamente que constituya un delito.