Linaje jerárquico: ser-espejo

LINAJE JERÁRQUICO:SER-ESPEJO Ser que actúa como canal del sistema sutil de comunicaciones denominado Espejos. La mónada es el punto de contacto entre su conciencia y la Jerarquia Espejos; por lo tanto, es en los niveles profundos donde se establece su vínculo con esa Jerarquia. Los grupos y los individuos que integran la Jerarquia Espejos en la superficie de la Tierra se encuentran en fase de formación. En rarísimos casos actúan externamente como Espejos, pues aún pueden interferir con la mente analítica en el proceso de captación y de transmisión. Por eso, la mayoría de las veces la actividad interior de un ser-espejo es, para él, inconsciente. En el ciclo pasado, cuando la polaridad masculina del planeta estaba en expansión, el trabajo de Espejo era conscientemente llevado a cabo por Iniciados en algunos monasterios del Tíbet. Hoy, en sincronismo con el proceso energético planetario y solar, los seres-espejo expresan la polaridad femenina de la energía. La formación de los seres-espejo incluye la construcción de un canal interior puro, que se origina en la vida espiritual y divina; para eso es necesaria una reestructuración de sus cuerpos, cuyo patrón vibratorio debe ser compatible con la meta superior de su esencia. Esta formación se compone de tres etapas: 1.   Descubrimiento y activación de un nuevo modo de pensar. Ocurre en el plano intuitivo y en el mental, y su vibración corresponde a la del color violeta. 2.   Reconocimiento de los errores cometidos y reequilibrio de sus efectos, lo cual está expresado simbólicamente en"trasponer el velo de la ignorancia y de la ilusión".Ocurre en el nivel astral-mental y su vibración corresponde a la del color amarillo. 3.   Incorporación de un nuevo estado de ser, en armonía con los cambios que se producen en la humanidad y en el planeta como totalidad, a medida que estos reciben las energías irradiadas por los Espejos del Cosmos. Ocurre sobre todo en el plano etérico, pero también en el físico. Cuando llega a la plenitud, su vibración corresponde a la delcolor blanco. En este nuevo estado, la unidad y la relación del individuo con la esencia de la Vida maduran. Sus sentidos se convierten en verdaderas antenas que transmiten la realidad subyacente en los hechos y en los seres. Al consumarse esta tercera etapa de formación, él es consagrado como ser-espejo. Parte de la tarea de un ser-espejo es la captación de parcelas del Plan Evolutivo. La idea - impulso superior transmitido por Fuentes conocedoras de este Plan - no tiene forma, no trae sensaciones ni se presenta como conceptos y, al incidir sobre su "pantalla interior de comunicación", contacta y activa toda una red de otros seres, inclusive devas, que la modelarán. La idea proyectada se va definiendo en su aura a fin de reflejarse más claramente. Con el movimiento que genera en los éteres el paso continuo de la idea (tal como ocurre en la transmisión de un sonido por la vibración de la cuerda de un instrumento), las sustancias de los niveles donde ella debe manifestarse se van aglutinando y comienzan a materializarla. Una comprensión superficial del tema puede llevar a creer que el trabajo de un ser-espejo se reduce a previsiones, a la recepción de mensajes del más allá, a la visión de realidades sutiles o a otra actividad que requiera dones paranormales. No es esencial que surjan videntes y psico-transmisores en la nueva humanidad, sino que se desarrollen individuos conscientes, que puedan ser ejemplo vivo del cumplimiento de la Ley. La simple presencia física de un ser-espejo consagrado es, para quienes lo rodean, un factor que contribuye a un constate ajuste de sus vibraciones al Plan Evolutivo. Las Jerarquías guían a cada individuo para que se sintonice con el propio Linaje Jerárquico. Un ser que actúe en otros linajes jerárquicos que no sea el de los Espejos expresa una energía peculiar, característica de la función que desempeña. En cambio, el ser-espejo sólo canaliza energías, no las expresa de modo particularizado. Su papel es permanecer neutro, "transparente". Entre las aptitudes de un ser-espejo que haya pasado por las Iniciaciones en los tres Espejos Mayores y esté, por lo tanto, liberado de vínculos con las fuerzas materiales, se encuentran:  controlar el tiempo, materializar y desmaterializar formas, dominar el poder alquímico de la luz, transmutar energías, relacionarse con otros universos y reconocer el propósito de la existencia de toda criatura viviente. Por eso, para actuar en el mundo externo, es necesario que haya trascendido el ego y alcanzado la plenitud como mónada. Un ser-espejo tiene que reafirmar la Palabra y hacerlo con pura fe, pues no le será dado comprenderla hasta que su obra esté libre de los peligros de ser desvirtuada. Cuando está al servicio de la manifestación de una Raza futura, su esencia está inmersa en el mar de vibraciones que la cualifican. Él es un amplificador de esas vibraciones; las intensifica para que penetren diferentes esferas. Fuente: LÉXICO ESOTÉRICO, de TRIGUEIRINHO