Un año de cambio de tendencias y consolidación de la segunda era dorada de la televisión
2011 pasará a la historia por ser el año en el que los productores se dieron cuenta de que con 150 millones de presupuesto y una estrella de renombre no está todo hecho. No nos referímos al fracaso en taquilla de films como Cowboys and Aliens o al pinchazo crítico de Piratas del Caribe 4, sino más bien al triunfo de pequeñas películas como Cisne Negro, La Boda de Mi Mejor Amiga o Criadas y Señoras, que con presupuestos irrisorios para el cine norteamericano han coronado varias semanas seguidas el top-1 de las películas más vistas mientras sus protagonistas se llevaban todos los premios a casa. Por no hablar de las tardías The Artist o Drive, perfectos ejemplos de cine exitoso gracias a una propuesta honesta y arriesgada.
En televisión la cosa ha sido mucho más contundente. A la llegada de las titánicas Juego de Tronos, Homeland y Boss se ha sumado la eclosión definitiva de todo el potencial que albergaban estrenos recientes como Justified, Spartacus y, sobre todo, Boardwalk Empire, que se erije como la principal rival de la olímpica Breaking Bad en nuestro ranking televisivo. Todas ellas conforman lo que ya podemos llamar la segunda época dorada de la televisión tras el final de Los Soprano, The Wire, A Dos Metros Bajo Tierra, Perdidos y 24.Descubre tras el salto cuáles son a juicio de toda la redacción de La Palomita las 10 mejores películas y series -con spoilers- que nos ha dejado 2011, así como otras categorías curiosas que nos sirven para no dejar de lado estrenos que no por ser menos contundentes merecen quedar en el olvido.
Las 10 películas de 2011
10. 13 Asesinos
13 Asesinos no es solo la prueba de que el auge del cine asático es una tendencia consolidada más que una moda pasajera, sino que es la unión perfecta de entretenimiento y calidad. Entre el espectador que se conforma con acción y batallas y aquel que busca más allá de hechos. Los espectaculares combates entre el grupo protagonista frente a cientos de soldados enemigos harán las delicias de los primeros, mientras que la preciosista fotografía y la simpleza de un relato histórico centrado en la emoción, la supervivencia y el honor, la convierten en una de las joyitas que todo cinéfilo debería haber visto en este 2011 que nos deja.
Porque nunca el antiguo oriente estuvo tan ligado al western crepuscular desde que los Siete Magníficos intentaran eclipsar a los samuráis de Kurosawa. Y solo por eso, estamos de enhorabuena.
9. Nader y Simin, Una Separación
Buen ejemplo de lo que poco que hace falta para lograr una película notable: buenas actuaciones y buen guión. Estrenada en octubre y multipremiada película iraní del director Asghar Farhadi en la que se nos cuenta un intento de divorcio entre una pareja afincada en Irán. Farhadi cuestiona sin flaquear el funcionamiento de las leyes de su país y el alcance de las creencias religiosas a través de una historia entretenida y llena de matices.
Por tanto, los contrastes y la complejidad de un país como Irán quedan reflejados en esta obra que merece la pena ver sin pensárselo dos veces.
8. Medianoche en París
El cineasta más carismático, extraño y verborreico volvió a ocupar este año el hall de la fama de los mejores directores activos del momento gracias a una de sus más excelentes creaciones modernas. Woody Allen, cuyas anteriores producciones andaban a medio gas y no conseguían la ovación general del público, regresa a lo mejor de sí mismo en esta inteligente, ingeniosa y bien obrada Medianoche en París.
El maestro vuelve a sus orígenes con una historia, encabezada por los fantásticos Owen Wilson y Marion Cotillard, repleta de creatividad y sensualidad, un finísimo humor, unos diálogos inteligentes y una ambientación maravillosa que nos transporta a lo más académico de cada época y que deleita al espectador. Un perfecto cuento de amor, pero no entre dos, sino entre el ser humano y su eterna y errónea convicción de que cualquier tiempo pasado fue mejor. El renacer de Allen.
7. Inside Job
Gran documental sobre la crisis. Michael Moore se queda a la altura de parvulitos al lado del trabajo realizado por Charles Ferguson. Si alguien todavía alberga dudas de por qué, cómo y desde cuando estamos en crisis y si alguna vez saldremos, debería anotarse como propósito de nuevo año el verlo. Tras desmontar en menos de una hora todo el sistema judicial, económico y financiero de Estados Unidos, la voz de Matt Damon (es el narrador) pasa a explicar cómo esto afecta al resto del mundo.
Aunque los criterios a la hora de repartir la estatuilla dorada sean a veces algo dudosos, huelga decir que Inside Job recibió uno el año pasado a Mejor Documental.
6. El Árbol de la Vida
Habrá quien nos tachará de pedantes, gafapastas o simplemente de ir en favor de la corriente más cultureta simplemente por incluir este film en el ranking, ya que si bien es cierto que El Árbol de la Vida ha sido uno de los fenómenos del año, no es menos verdad que la cinta está plagada de fallos que van desde un ritmo poco digestónico a un Sean Penn directamente decepcionante. Ahora bien, todo lo bueno que tiene el último film de Malick lo tiene a la enésima potencia.
No solo estamos ante la mejor dirección artística del año, sino también a una banda sonora a cargo de Alexandre Desplat de esas que quitan el hipo sumada a la eclosión definitiva de un director con alma de pintor cuya única obsesión es ofrecer siempre el plano perfecto. Y eso es El Árbol de la Vida, una encadenación de varias de las instantáneas más bellas que nos ha dejado el séptimo arte.
5. The Artist
Una de las grandes sorpresas del año. Algo tardía pero no por ello menos merecedora de reconocimiento. The Artist es la prueba de que todavía es posible seguir innovando, de que no todo se ha inventado ya en la gran pantalla de celuloide. Michel Hazanavicius, director prácticamente desconocido a pesar de su apellido y de contar con cuatro filmes anteriores a este, nos presenta la típica historia de ascenso y caída de una estrella de cine. En este caso, el talento y la originalidad no están en el fondo sino en la forma. En pleno siglo XXI ha tenido la valentía de rodar una película muda y además le ha quedado muy bien. El director francés ha demostrado tener muy buen pulso con este filme admirable en el que todo está calculado al milímetro.
The Artist es una propuesta arriesgada, divertida y entretenida para los amantes del cine clásico, los incondicionales de las historias románticas y para cualquier espectador con ganas de ver algo distinto y con calidad.
4. Incendies
Estrenada a principios de marzo, quizá pasó algo desapercibida por el gran público. Aunque estuvo nominada a la categoría de Mejor Película de habla no inglesa, el Oscar se lo robó (injustamente para muchos) la danesa En un mundo mejor. Eso sí, se llevó grandes premios en el Festival de Toronto y en la Seminci. Y pocos son para todo lo que tenga que ver con esta película. Una joya canadiense capaz de poner los pelos de punta a cualquiera. Basada en una obra de teatro, relata sin efectismos una historia dura que se va colando a través de ti, como la locura incontrolable que va gestándose poco a poco en los torturados que muestra.
A través de un secreto relacionado con la historia familiar que deben ir desenmarañando dos hermanos mellizos, el director nos descubre lo atroz de una época de guerra y las circunstancias a las que se ven irremediablemente abocadas sus víctimas. Los descendientes del horror se hacen un hueco en tu memoria sin que puedas hacer nada para evitarlo. Película perturbadora de indiscutible visionado cuya historia perdura en el espectador mucho tiempo después de salir del cine.
Sin lugar a dudas, una de las mejores adaptaciones cinematográficas de una obra literaria que hemos tenido la oportunidad de ver. El western clásico de los hermanos Coen se merecía indudablemente un puesto en la lista. En primer lugar, por haber recuperado un género que desde hacía tiempo no se producía. En segundo lugar, por haberlo resucitado tan cojonudamente bien. Sin efectos especiales ni ayuda de nuevas tecnologías, los directores supieron retratar una historia del Oeste auténtica, con un guión excelente y una ambientación genial, a lo que además se añade un protagonista de honor, Jeff Bridges, quien con su personaje de Cogburn, supo cautivar al público. Llena de tópicos y vacía de pretensiones, sin condimentos ni aditivos pixelados. ¡Un hurra por los Coen!
2. Drive
La última gran película del año ha conseguido aunar la opinión de la crítica, que se derrite ante la dirección sobria pero moderna de Winding Refn y ante Ryan Gosling, y al público, que ha encontrado en Drive una de las películas más asequibles para los poco acostumbrados al cine más contemplativo. Drive entra en esa categoría por los pelos, ya que su recta final es para mear y no echar gota al nivel de otros thrillers negros como Perros de Paja o Marathon Man.
Mención especial para el reparto, desde un Gosling en el mejor momento de su carrera hasta un plantel de secundarios que van desde la fragilidad de la bella Carey Mulligan a la veteranía de todoterrenos como Ron Perlman o Bryan Cranston. Por no hablar de una banda sonora que logra "eso que Tarantino prentende con cada una de las canciones de sus films", es decir, realzar cada escena aportando un tono épico totalmente cool.
1. Cisne Negro
Aunque el estreno de este film fue en enero de este año, ningún otro ha logrado superar la cinta de Darren Aronofsky. La obra magna del director, que le valió una merecidísima estatuilla a Natalie Portman, se alza como una composición prácticamente perfecta del séptimo arte.
Un original y elaboradísimo guión que ahonda en la mente humana, una tensión siempre en alza ornamentada por una estética y una ambientación nuca vistas antes, una actriz protagonista que ofrece una de las mejores interpretaciones vistas hasta ahora y una factura técnica impecable que introduce de lleno al espectador en un mundo caótico, son los ingredientes por los que Cisne Negro es coronada en La Palomita como la mejor película del año, porque jamás el ballet clásico había resultado tan angustiante.-Películas elegidas por la redacción que se han quedado fuera del ranking: Attack the Block, Crazy, stupid, love, Rango, Un Dios Salvaje, Eva, El Topo y No Habrá Paz Para los Malvados.
10.Wilfred (1ª temporada)
Probablemente, la comedia del año. Quién iba decir que una serie con una premisa tan inverosímil sobre el papel podría ser tan adictiva puesta en práctica, y lo mejor es que derrocha tanta calidad tanto en la comedia como en su parte más dramática (pilar fundamental de la serie). Porque Wilfred no es la clásica comedia flowerpower a la que nos tienen acostumbrados, ya que detrás de todo ese gamberrismo existe una fragilidad mayúscula. Evidentemente, nada más ver a Wilfred lo único que puedes articular es un ¡Pero qué coño!, sin embargo, una vez que hemos superado el preámbulo y aceptamos al personaje por lo que es, entramos en la dinámica de la serie. No es un humor fácil, y cuesta darle una oportunidad, pero os garantizo que vale la pena el esfuerzo para disfrutar de una de las series mas inteligentes del 2011.
Fue uno de los estrenos que más expectación atraían. Desde luego, el formato con el que nos sorprendía el creador de Nip Tuck era algo fresco en televisión pero también bastante volátil. American Horror Story ha gozado de una temporada notable donde el sexo, el terror y el humor se impregnan en un relato que ha servido para plasmar todos los tópicos del cine de terror americano episodio a episodio. Evidentemente, a medida que transcurrían los capítulos también nos percatábamos que American Horror Story es una serie muy entretenida pero a la que no hay que tomarse demasiado en serio.El capítulo con el que se cerraba la temporada es quizás la muestra de ello. El delirio estaba impregnado en el ambiente a tal nivel que ya era difícil dilucidar donde acababa el terror y donde empezaba la comedia. Finalmente con tanto fiambre, el hogar de los Harmon parecía más bien una jaula de grillos. No obstante, ha sido un placer ver a Jessica Lange dando de nuevo un recital de interpretación.
Que no hayamos contado los comienzos de la cuarta temporada a la hora de hacer este ranking es la razón por la cual tenemos a Peter y Olivia asomando por aquí. Como ya dijimos el pasado año, la tercera temporada supuso el salto definitivo de Fringe a las ligas mayores conformando una mitología de culto dentro de la ciencia ficción. Lo que Expediente-X no hizo hasta su final, Fringe lo ha llevado a cabo este año exprimiendo la trama central de los universos paralelos hasta sus últimas y emocionantes consecuencias. Quizás por eso y porque ni los propios guionistas pensaban que veríamos una cuarta temporada que la serie ha llegado ahora a un punto muerto del que esperamos se recupere pronto. Aún así, siempre nos quedarán las impagables dobles e incluso triples interpretaciones de Anna Torv y John Noble.
Aunque se llegó a estrenar una versión recortada en cines este año, Carlos, la miniserie, es una impagable producción europea de 2010 a la que no le sobra ni un solo segundo. Durante 3 episodios asistimos a la vida de uno de los terroristas más complejos y peligrosos de la historia, Carlos "el Chacal", que durante los años 70 fue uno de lo más buscados del globo debido a un asalto que capitaneó a la OPEP en el que asesinó a varias personas.
Entre la reivindación del mensaje político y la sed de sangre más básica, durante la miniserie asistimos al retrato psicológico de psicópata cuya inteligencia solo puede compararse a un pulso pétreo frente a sus víctimas. Sin duda, gran parte del éxito de Carlos se lo debemos a su protagonista Edgar Ramírez, que con este titánico trabajo se ha colocado como una de las primeras opciones a todos los personajes latinos que se escriben actualmente en Hollywood. Y no es para menos.6. Justified (2ª temporada)
¿Y que me decís del amigo Raylan Givens y su segunda y espectacular temporada? Sin duda, el segundo año de Justified ha sio el de la confirmación de que estamos ante otra gran obra de arte. Gran parte de la culpa la tiene Margo Martindale con su sobresaliente interpretación dando vida a Mags, una gánster desde luego diferente a lo que nos tenían acostumbrados.
Justified se ha convertido en una pequeña joya, en un western televisivo donde los guiones están pulidos y la puesta en escena trabajada. Sin duda, el ambiente melancólico y la mirada de Raylan que refleja la historia de una tierra donde es difícil salir a delante, son claves para que Justified te acabe convenciendo. Y los espectaculares duelos, claro.5. Boss (1ª temporada)
Que Kelsey Grammer era uno de los reyes históricos de la comedia (quizás, y digo quizás discutiéndolo con Seinfield) era algo que todos teníamos claro. Ahora bien, con su nueva serie Boss, que teóricamente fue renovada antes de su emisión y que a tenor de las audiencias no me queda claro si veremos segunda temporada, Grammer ha creado a otro personaje por el que sin duda será recordado al igual que siempre lo será por el sofisticado, pedante pero encantador Frasier Krane.
La cadena Starz (Spartacus) ha demostrado que tiene la capacidad suficiente para jugar en el patio de los mayores junto a la AMC (Mad Men) y HBO (The Wire) creando una serie espectacular donde la política es descrita como una maquinaria de poder manejada por aquellos que no temen perder un trocito de su alma por el camino. Tom Kane ha demostrado ser una de los mayores hijos de perra que ha parido la pequeña pantalla, cuya ambición por mantenerse en el trono, por no sucumbir ante sus enemigos y no mostrar debilidad alguna le cuesta el único lazo de amor verdadero que todavía perduraba en su decadente vida.Quizás Boss por lo general tiene un tono muy sobrio, en otras escenas en cambio utiliza una rudeza y brutalidad que descoloca bastante al telespectador. Es difícil llegar a creer que un alcalde de una ciudad tan importante como lo es Chicago sea en realidad un criminal a los que hay que temer más que respetar, en eso la cadena Starz ha sabido mantener su sello dando un giro de tuerca a una historia ya anteriormente vista. Porque la enfermedad de Tom Kane de momento ha quedado relegada a un segunda plano.
La serie de la HBO ha sido incuestionablemente uno de los eventos televisivos del año, llamada a ser una de las grandes series de la historia con toda certeza. Muchos la describen como la versión adulta de El Señor de los Anillos y otros como una gran epopeya de grandes dimensiones. Sea como fuere, lo cierto es que ha cautivado tanto a crítica y público, logrando realizar una historia donde se mezcla las eternas luchas de poder, un tono fantástico y por supuesto unos personajes extraordinarios ("Creciste con actores. Aprendiste su oficio, y lo aprendiste bien.Pero yo me crie con soldados, Aprendí a morir hace mucho tiempo." ¡Tremendas palabras de Ned!)
Seguramente, el momento que he elegido lo sigamos todos teniendo en nuestra retina ante la incredibilidad de lo que contemplábamos impotentes. Porque hace falta tener
3. Homeland (1ª temporada)
Seguramente, la primera temporada de la serie de Showtime haya sido a grandes rasgos perfecta. No obstante, Homeland es una serie que a no ser que me demuestren lo contrario, tiene fecha de caducidad temprana. Un ejemplo ha sido ese capitulazo final de hora y media que los responsables de la serie nos regalaron donde nos las hicieron pasar canutas, dudando de si Brody sería capaz o no de inmolarse y llevarse con él a medio gobierno de los Estados Unidos.
Homeland ha ido cimentándose poco a poco dando al espectador en cada capítulo una pieza más del puzle y algún giro de guion que si bien no han sido chapuceros si que han sido algo tramposillos, pero quevisto el resultado global se les perdona. Homeland es posiblemente la mezcla perfecta entre Rubición y 24 (quizás más cercana a la serie de la AMC de lo que muchos se piensan) donde la mayor diferencia radica en que Homeland sustente gran parte de su historia en sus personajes.Damian Lewis ha sabido dar forma a un personaje nada fácil de interpretar, y ha tenido éxito por esa imprevisibilidad de un personaje que no se encuentra del todo cuerdo después de una experiencia tan traumática (por no hablar del conjunto de sensaciones que transmite en el momento bunker). Carrie genialmente interpretada por Claire Danes es más que probable la que haya conseguido hacer sombra al gran personaje que es el sargento Brody. La intensidad con la que Carrie lleva en cauce su vida sea quizás lo que más nos ha apasionado, y seguramente por ello acabe pagando un alto precio al salir poco airosa de esa extraordinaria relación con Brody que destila química por doquier.2. Breaking Bad (4ª temporada)
¿Qué podemos decir de esta serie que no esté escrito ya? Pocas cosas la verdad, tan solo remarcar lo que ha sido sin lugar a dudas el mejor momento del año en lo que a series se refiere. Me estoy refiriendo al preludio que marca la senda de la muerte que nuestro admirado Señor Fring tuvo que recorrer a costa de un Walter White que una vez mas, ha traspasado una línea de la que ha salido indemne, pero sin olvidar que antes o después tendrá que pagar peaje.
El final de Fring cierra un personaje extraordinario del que todavía quedan algunos detalles por conocer (¿Quién era en Chile?). Pocas veces existe tanta unanimidad al dar fin a la trayectoria de un personaje tan carismático y que tanto peso tenía en la serie, y en el fondo la mayoría de los seguidores de Breaking Bad sabíamos que esto acabaría con Mr. Pollos a dos metros bajo tierra. Pero si he de quedarme con un momento preciso del genial “4x12 Face off” sin duda elijo los instantes que preludian la muerte de Gustavo al son del western poniendo punto y final al mejor villano moderno de la pequeña pantalla.
La segunda temporada de Boardwalk Empire es una promesa cumplida. Cuando hace dos años la HBO reunió al plantel principal de directores y guionistas de Los Soprano para ponerlos al servicio de Martin Scorsese, lo que se prometía implícitamente era un nuevo capítulo televisado de la historia criminal norteamericana equiparable al éxito protagonizado por James Gandolfini y a Deadwood, ambas también de HBO.
Tras una primera tanda de episodios en las que la falta de alma de los personajes y de rumbo para la trama solo era comparable a la calidad técnica de su puesta escena y al talento de sus intérpretes , este año esos elementos por fin se han juntado con las expectativas arriba descritas consolidando la última obra maestra de la televisión. Momentos como el atentado a Nucky, la huída de Van Alden (¡menudo personaje!) o la venganza de Chalky son solo tres ejemplos de las escenas para el recuerdo que nos deja esta segunda temporada.Si 2010 fue el año de la eclosión de Breaking Bad, este lo ha sido para Boardwalk Empire, y solo nos queda esperar que la serie protagonizada por el pérfido Nucky Thompson (Steve Buscemi) mantenga el tipo al igual que Walter & CIA, sobre todo tras ese impactante final en el que nos ha quedado claro que el trono de Atlantic City tiene ya un nombre forjado con sangre.
El tráilerPorque desde la primera colaboración entre Trent Reznor y David Fincher para los títulos de crédito de Seven sabíamos que estos dos tenían mucho trabajo en común por delante. El regalo llegó finalmente el pasado año con la oscarizada partitura de La Red Social, y desde el primer tráiler de Millenium I prometen superarse en un film que no por no poder ver hasta 2012 deja de ser uno de los que más esperamos. Con este traíler, como para no hacerlo.
El póster
Porque somos unos pajilleros. No hay más.La sorpresa
El Perfecto Anfitrión: tenéis nuestra crítica aquí.
La secuela/precuela
El Origen del Planeta de los Simios: tenéis nuestra crítica aquí.
El remake
Valor de Ley 2011: Tenéis nuestra crítica aquí.
La película española
No habrá Paz para los Malvados: tenéis nuestra crítica aquí.
¡Y FELIZ 2012 A TODOS!
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