De paseo por Londres, cerca de la Catedral de St Paul’s, algo llama mucho la atención… y es justamente la idea de Konstantin Dimopoulos, un artista de origen griego y de nacionalidad autraliana, autor del movimiento “Los árboles azules” (o ‘The Blue Trees’ en inglés).
¿Qué es eso que llama la atención? Árboles de copas verdes pero de troncos azules, árboles que siempre estuvieron allí y que ahora están “vestidos” para llamar completamente nuestra atención. La gente reacciona, se asombra, los admira, los fotografía, los toca. Es notable la adoración de estas bellezas que antes eran ignoradas.
Los árboles azules
Los árboles con troncos pintados de un azul eléctrico no existen en la naturaleza, es por eso lógica la reacción de asombro al verlos. El fin de este movimiento es hacer un llamado de atención y concienciar a la humanidad sobre lo importante que es detener la deforestación. El autor crea un paisaje surrealista que nos recuerda que los árboles son los pulmones del mundo. Estamos rodeados de árboles y, a decir verdad, generalmente no los apreciamos como deberíamos. Esta obra destaca a estos hermosos organismos que actualmente corren peligro en varias zonas de nuestro planeta.
Estos árboles de troncos azules están en varias ciudades del mundo y la idea del autor es propagarlo. Asegura que lo que dá coloración al tronco azul no es pintura sino agua con un pigmento que no daña en absoluto al árbol. Dependiendo la cantidad de lluvias, este color permanecerá de 12 a 18 meses.
Puedes consultar la página web del proyecto de Konstantin Dimopoulos donde hay fotos y videos del proyecto por el mundo.
Cuando pensamos en los árboles pensamos en vida, oxígeno, naturaleza… esta obra nos refresca la importancia de estos hermosos organismos que tendríamos que adorar, sin importar el color que lleven.
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