'Los caminantes: Necrópolis' de Carlos Sisí

Título: Los caminantes: NecrópolisAutor: Carlos SisíEditorial: DolmenPag.: 320ISBN: 9788493814304 PVP: 18,95€

Con este Los Caminantes: Necrópolis, Carlos Sisí no ha hecho más que corroborar una teoría personal que tengo al respecto; dejarle delante de un teclado escribiendo es como soltar a Godzilla dentro de una cristalería: No deja títere con cabeza.Si al final de Los Caminantes teníamos al grupo de sufridos supervivientes felices y contentos en el polideportivo de Carranque tras haber sobreviviendo al ataque del enloquecido padre Isidro y sus hordas de no-muertos, en esta segunda incursión en su particular universo zombi, el madrileño decide dinamitarlo todo hasta los cimientos.Pero no adelantemos acontecimientos.La vida es idílica (bueno al menos todo lo idílica que puede ser la vida en un polideportivo rodeados por miles de zombis hambrientos) en Carranque. El padre Isidro está bajo custodia y el experimento con el Necrosum sobre Juan Aranda ha sido todo un éxito.Ahora el intrépido líder de la comunidad de supervivientes tiene la capacidad de caminar entre los zombis ya que estos le ignoran totalmente. Pronto, las esperanzas del doctor pasan por poder inocular al resto de los habitantes del polideportivo y que estos puedan comenzar el lento proceso de reconstrucción.En esas nos encontramos hasta que Juan hace a la comunidad un anuncio sorprendente: Abandonará Carranque en dirección a los cercanos estudios de Canal Sur donde pretende enviar un mensaje por radio con la esperanza de entrar en contacto con otros grupos de supervivientes.Y al poco de su partida se desata el Apocalipsis…En este punto la narración se sucede entre varias líneas argumentales que volverán a confluir únicamente al final del relato.Por un lado tendremos a Juan en su periplo hasta los estudios de Canal Sur donde cruzará una Costa del Sol devastada por los no muertos. Su destino se cruzará con el de un soldado del ejército español que le permitirá descubrir cuales fueron los verdaderos planes del ejército antes de que todo se fuese al infierno. También le pondrá tras la pista de un científico que en los primeros días de la infección estuvo trabajando en un remedio para la pandemia en un emplazamiento militar cerca del aeropuerto de Málaga.Gabriel y Alba son dos hermanos que han sobrevivido a los zombis refugiándose en los sótanos del edificio de apartamentos donde vivían antes de que todo comenzase. Alba es una niña muy especial, ya que tiene visiones premonitorias sobre el futuro. Esta habilidad les ha permitido salir airosos de muchas dificultades, sin embargo el futuro que ahora se les presenta en los sueños de la niña parecen algo funestos: Si quieren seguir con vida deberán abandonar su refugio e internarse en las montañas que se encuentran más allá de su urbanización. Un mastín español vagabundo se les unirá en esta terrorífica aventura.Justo al poco de la marcha de Juan y antes de que se desate la tragedia, el grupo Anti-zombis de Dozer y sus muchachos abandona Carranque a través de las alcantarillas en dirección al puerto de Málaga. Desde la lejanía escuchan insistentemente la sirena de un barco a punto de atracar, por lo que deciden ir a investigar.Y por último llegamos a los villanos. En esta entrega, el padre Isidro pierde un poco de protagonismo a favor de los auténticos malos de esta entrega: Un grupo de snobs aficionados a las armas y que atrincherados en su mansión de Marbella salen únicamente para llevar a cabo sangrientas “partidas del caza” en busca de los pocos humanos que aún puedan esconderse entre las ruinas de la civilización. Serán estos asesinos, encabezados por un sociopata alemán llamado Reza los responsables de la destrucción de Carranque y la fuga del padre Isidro. En esta ocasión, el reto del grupo de cazadores es el de conseguir a una mujer e Isabel, pareja de Moses, será la víctima elegida.Como siempre, el relato de Carlos es frenético y de ritmo endiablado, muy visual y cinematográfico. Nos busquemos introspección y dobles lecturas en el texto, esto es un blockbuster sobre zombis en toda regla, un libro sin más pretensiones que la de entretener al lector. Los Caminantes: Necrópolis se lee con rapidez, un relato ameno y vibrante, con un final abierto a una más que segura tercera parte. Ya debimos sospecharlo cuando Sean Connery puso su casa de Marbella en venta… Algo malo estaba a punto de pasar.

LA VALORACIÓN DEL SARGENTO ES:

POR COSAS COMO ESTA MERECE LA PENA VESTIR EL UNIFORME(Puntuación: 8 sobre 10)