Revista Opinión

Los cetáceos de Castilla-León

Publicado el 17 febrero 2011 por Rgalmazan @RGAlmazan

Cuando mi amigo Antonio me mandó un email con el enlace, creí que estaba de broma. ¿Cómo podía ser? Pues lo es.

Ahora resulta que no es necesario tener mar para que las ballenas y similares habiten en ciertos parajes. Y así parece ser por lo que se deduce de un documento de la Junta de Castilla-León.

Cetáceos en Castilla-León

El documento lo he sacado del mismo enlace

Si no fuera porque es un tipo de corrupción y una mentira oficial, esta falsedad absoluta, burda y zafia debería figurar en los periódicos de humor y no en documentos oficiales de la Junta.

Uno puede pensar que esta Comunidad pueda tener preocupación por su entorno. Que pretenda ayudar a que ciertas especies animales puedan subsistir. Y eso, a pesar de que se cargaron al lince y siguen con los lobos. Pero lo que es difícil de creer –rogaría a la Junta de Castilla-León que me invitara a comprobarlo— es que haya cetáceos que proteger en su territorio.

Y que por ello, se pidan fondos FEADER a la Unión Europea, dentro del Programa de Desarrollo Rural ( se pide una subvención de 1838 millones). Y que cómo mínimo reconocen que llevan seis años haciéndolo.

Imagino una conversación de bar entre dos castellano-leoneses:

--Pues nada chico que iba yo, prudente como siempre, ya me conoces, a cien por la carretera, y de repente se me echó encima un cachalote

--¿Y qué hiciste?

--¿Qué voy a hacer? ¿No sabes que es una especie protegida y que está en periodo de extinción? Pues nada, dejarle que cruzara. Menos mal que tuve reflejos que si no, me lo cargo y la Junta lo mismo me empapela.

--Pues tuviste suerte porque dicen que por ahí hay una Orca asesina, que anda suelta, y no se anda con bromas. Y cualquiera le hace algo, como están protegidas y recibimos fondos para cuidarlas.

Lo que debería desaparecer es esa especie de político gorrón, capaz de mentir, sin vergüenza, de hacer el ridículo, de cualquier cosa, con tal de obtener recursos para quién sabe qué. La especie de político gorrón no hay que cuidarla, no debe ser especie protegida, hay que acabar con ella. Porque ya estamos hartos de estas especies y de los que les votan. ¿Hasta cuando se van a consentir estas barbaridades? ¿Cómo es posible votar a alguien que durante años persiste en esta mentira, insiste y se queda tan campante?

A este paso nos meterán en los presupuestos partidas para proteger a nuestros tigres de Bengala o la cría del orangután. Y seguiremos tragando.

Yo sigo preguntándome de quién es la culpa, Y desde luego, mucha responsabilidad es de quienes, a pesar de estos desmanes, siguen votando a estos tramposos compulsivos.

Salud y República


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas