“los dioses de la revolucion roja-rojita”

“LOS DIOSES DE LA REVOLUCION ROJA-ROJITA”
En la extensa filosofía marxista-leninista, que rechaza la religión y aboga por una comprensión materialista de la naturaleza. Este sostiene que la religión es el opio del pueblo, en el sentido de promover la aceptación pasiva del sufrimiento en la tierra con la esperanza de la recompensa eterna. Por lo tanto, el comunismo aboga por la abolición de la religión y la aceptación de ateísmo.
Por otro lado en Cuba, el castrismo no escapa de esta realidad y haya encargado a Leonardo Boff una de las más valiosas "colaboraciones" de los teólogos de la liberación en Cuba "en mantener vivo el ideal comunista, como la ética comunista". Las ventajas para la dictadura son evidentes: el igualitarismo miserabilista, logrando con ello asfixiar la legítima tendencia de sano progreso y superación del alma humana.
En realidad, interpretando a Guimaraens, el comunismo cubano, al intentar abolir en la sociedad cualquier vestigio de las legítimas jerarquías como del propio Dios; desarrollaron una maquiavélica formula de un “ateísmo práctico”. Colocando a los héroes de la revolución en tal desplazamiento de las figuras divinas; produciendo para ello una clase de “divinidad zombis” que logran por un perverso tiempo la admiración del colectivo y un juego sutil con la santería.
Sin pretender dejar la traza de las pisadas cubanas, los rojitos venezolanos, buscan “canonizar” e interpretar la historia patria, adecuándola a sus intereses políticos, la búsqueda constante en shows mediáticos, la construcción de enemigos, sean imperios, personalidades y los muy atacados sectores de producción, para así lograr ensalzar a los supuestos exorcistas revolucionarios. Por otro lado, para contrarrestar estos “espíritus del mal” también, vienen progresivamente creando sus mártires, sin entender la diferencia entre los divino, lo mundano y lo vil.
Lo curioso del caso, en nuestra historia, quien funda el Panteón Nacional en decreto fue Antonio Guzmán Blanco para el año de 1874, y convertido como Monumento Nacional el 25 de julio de 2002. Siendo este sitio ocupado principalmente por los símbolos de una Venezuela heroica y libertaria, (sin signos de deidades y misticismos de bajo realeo).
Siendo los primeros personajes cuyos restos trasladados fueron: Francisco Rodríguez del Toro e Ibarra, Ezequiel Zamora, José Gregorio Monagas, Manuel Ezequiel Bruzual y Juan Crisóstomo Falcón. Luego Simón Bolívar y Luisa Cáceres de Arismendi. Ni presidentes de la democracia, ni luchadores en particular de las dictaduras reinantes en Venezuela, han ocupado espacio están distinguido lugar.
La inventiva y la necesidad de los “dioses” rojitos, buscan en la máxima decadencia de estos, usurpar la historia con el fetichismo y la muy imaginaria farsa de un héroe que se formo en las líneas de la Cuba comunista. Por Dios, a quien se le ocurre tal atropello a la dignidad y majestad de una nación, como Venezuela. No tienen límite realmente, en el afán de concebir los dioses de la revolución roja-rojita.
Dr. José E. Pons B / @joseponsb / Movimiento de Ascenso Social / MAS
NOTA. Imagen cortesia de Marco Ruis, del Miami Herald
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