Los Etruscos

Los etruscos son un pueblo que vive entre el 800 y el 300 a.C. En la zona de la actual Toscana. Existen dos teorías acerca de su origen. La primera es que se trata de un pueblo indígena que comienza a florecer con la revitalización de las redes comerciales griegas. La segunda de las teorías es la que dice que son un pueblo de Asia Occidental, que se mueve hacia Italia tras la caída del imperio Hitita y de Micenas. Se establecerían en paz con los nativos. 
La idea de una migración aunque discutida hoy día tiene varios puntos fuertes: Existen fuertes parecidos entre la lengua etrusca y las orientales, también hay paralelismos religiosos, y al fin y al cabo Heródoto nos lo narra. ¿Porqué no creerle?
Lo que si es seguro es que en el siglo VIII a.C. los toscanos comienzan a agruparse en forma de ligas urbanas de base agrícola y metalúrgica. Son ciudades como Clusium, Cortona, Perussia, Volterra, Rusellae, Vetulonia, Volsini, Populonia, Veyes, Torquinia, Ceres, Vulei, Statonia etc. En general las ciudades del sur eran mucho más activas en el comercio que las del norte, sobre todo por la cercanía a las colonias griegas.
Podría parecer que son un pueblo agrícola, que trabaja el campo de manera tranquila, vendiendo los cereales que producen... Nada más lejos de la realidad. Los etruscos produjeron un impacto profundo en el medio en que se asentaron, y acabaron por convertirse en la cabeza de puente entre el mundo griego y el romano. Esto lo vemos claramente cuando nos acercamos al estudio de las lenguas. El alfabeto etrusco es la base del romano, y aun así, hay pruebas de su semejanza con el griego.
La conexión con Grecia se formalizó a lo largo del gran camino de Campania, que conectaba con las posesiones griegas. A lo largo de este camino se fueron fundando ciudades como Pompeya, Nola, Capua, Sorrento, Nocero. Estos enclaves no obstante fueron rápidamente disputados a los etruscos por los pueblos montañeses de Italia. Éstos se dedicaban a la guerra, realizaban campañas periódicas de saqueo, de las cuales sacaban rapiña suficiente para sobrevivir.  El floreciente mundo etrusco era sin duda un blanco perfecto. Los asentamientos en la costa Adriática también fueron copados por las tribus celtas y por el poder romano.
De hecho el poder romano, creciente en la zona es la principal causa del repliegue etrusco a la zona de Etruria. La respuesta del pueblo fue integrarse en el sistema romano. Unas pocas familias importantes se acoplaron dentro de la clase dirigente romana, aportando entre otros a los reyes: Tarquino Prisco, Servio tulio y Tarquinio el Soberbio. La fusión de la religión y la cultura etrusca con la de Roma, matrimonios mixtos, incorporación de técnicas etruscas etc. Va pareja del desarrollo del poder romano en Italia. Uno de los ejemplos más claros de fusión cultural es la institución del patronato y la manumisión de esclavos en calidad de Libertos, de orígen etrusco. También recibieron los romanos influencia etrusca en la religión, cultivando un panteón de divinidades menores atribuidas a la naturaleza, sobre todo al agua. 
Ya en época republicana, comenzaron a realizar tareas de augures, a través del estudio de las vísceras de animales sacrificados. También fueron muy influyentes en la arquitectura y la construcción. En cualquier caso, tan grande es la aportación de los etruscos a Roma que nunca hubo guerra para absorver las ciudades etruscas.  Solo Veyes fue devastada, el resto de ciudades continuó ligada a Roma por alianzas hasta que se asimilaron dentro de la ciudadanía del imperio.
. Los etruscos se ligaron a Roma y en cierto modo pervivieron para siempre en su expansión.
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