Los fuegos artificiales navideños y nuestras mascotas

Clínica Veterinaria Díaz del Olmo: Perros y la pirotecnia.

Por: José Díaz del Olmo.

Una de las consultas más frecuentes que nos llegan a la Clínica Veterinaria Díaz del Olmo es acerca de cómo manejar el comportamiento de los perros durante los fuegos artificiales durante la Navidad.

Los fuegos artificiales (conocidos también como “cuetes”) y la mayoría de las mascotas, sobre todo los perros, no hacen una buena combinación. Puede que para nosotros la Navidad sea una fiesta muy esperada pero puede ser una odisea para nuestros engreídos. En este artículo, daré algunos tips para sobrellevarlo.

Nuestras mascotas no festejan como nosotros. La pirotecnia es la causante que estas fechas no sean las mejores para ellos. En principio, los perros tienen el sentido del oído mucho más sensible que el de nosotros, los seres humanos.

Para los perros, el sonido de la pirotecnia se asemeja al de un trueno muy fuerte. Así, las mascotas creen que el estruendo de la pirotecnia es el inicio de una tormenta que los pone en un estado de desprotección e inseguridad.

¿Cómo podemos ayudarlos?

• Mantener puertas y ventanas cerradas. Ante el sonido de la pirotecnia, los animales suelen desesperarse y salir corriendo del lugar en el que están, logrando pérdidas terribles como robos y/o atropellos en la calle.
• Mantener las luces de la casa encendidas. Así se sentirán más seguros, conscientes de lo que sucede en el interior de la casa.
• Hacer que se sientan protegidos y cómodos. Hacer que tengan a la mano todos sus juguetes y mantas. Aconsejo que estén en una habitación en la que puedan ocultarse debajo de una cama.
• Abastecerlos con agua. Cuando los animales están estresados, tienden a beber más agua.
• Usar lavanda para la manta con la que se cubre a nuestra mascota. Este olor suave puede ayudar a relajar los animales domésticos. No recomiendo usar aceites calientes o velas, debido a los choques de las mascotas.
• Hay que saber cómo actuar con nuestro perro en estas situaciones para no reforzar su miedo. Es importante ponernos en su lugar para entender cómo se siente y comprender que si ladra, aúlla o llora es porque necesita desahogarse y eso no debe enojarnos. En ningún caso hay que castigar al animal, ya que se agravará el problema y perjudicará la relación entre la mascota y su amo. La actitud correcta es simplemente actuar con normalidad, como si no nos diéramos cuenta del temor de nuestra mascota.

¿Qué tipo de medicación usar?

Se debe medicar a los perros antes que aparezca el ruido que desencadene el nerviosismo exacerbado, y debe ser específica para perros. De esta manera, el estrés y el nerviosismo se pueden controlar. Es normal que los perros reaccionen escondiéndose en algún lugar de la casa. Eso se debe a que encuentran un punto en el que se sienten seguros y protegidos; así que frente a esta situación, no hay que obligar al perro a salir de su escondite. Si deseas saber qué tipo de medicinas son apropiadas para tu perro, no dudes en contactarme por el Facebook.

Por último, y si no cuentas con una mascota, te recomendamos no usar pirotecnia en Navidad, porque asusta a los perros.

Hasta el próximo post,

José Díaz del Olmo