Los misterios del Ministerio

En julio del 2011, la elección de Aída García Naranjo como ministra de la Mujer y Desarrollo Social iniciándose el gobierno del presidente Humala generó esperanzas de que se produciría  un cambio real en el sector, especialmente de parte de los distintos grupos de mujeres y de feministas que durante décadas han venido trabajando, proponiendo y peleando incansablemente por los derechos de las mujeres, la igualdad, la no violencia. Se esperaba que una ministra vinculada a los movimientos sociales y en particular a los de mujeres hiciera posible que el Mimdes cumpliera por fin con el objetivo de ser el ente rector de las políticas de género.La extensa consulta del plan de igualdad de género (1) realizada en 24 departamentos incluyendo a Lima-provincias y Lima metropolitana que convocó a una gran variedad de colectivos y de mujeres reafirmaba la esperanza. Empresarias, campesinas, pobladoras, indígenas, mujeres rurales, afrodescendientes,  lesbianas, mujeres sindicalizadas, mujeres viviendo con VIH, mujeres privadas de su libertad, etc. participaron en el proceso abriendo un espacio de análisis, reflexión y propuesta pocas veces dado en el país, más aún con tanta diversidad.Era este proceso un buen indicador de que se avanzaba, luego del impacto que tuvo en el accionar de la ministra y en su imagen la muerte de los niños y la niña de Cajamarca -suceso ampliamente difundido por la prensa- del que se acusó al PRONAA, y, que dio espacio a las acusaciones a la ministra como culpable del asunto en un primer momento y de insensible después. Momento crucial para el ataque de parte de un sector, al que no se le puede acusar de carencia de reflejos a diferencia de la ministra en esa situación. En el fondo, sin dejar de reconocer su falta de reacción  en un primer momento,  no se le perdonaba que fuera de izquierda, que hubiera llevado a reconocidas feministas y mujeres y hombres vinculados al movimiento social en su equipo. Había que bajársela y éste era el pretexto perfecto.Aunque hubo un tiempo de tranquilidad para continuar el trabajo y lograr los objetivos propuestos, como podemos ver en los resultados de la consulta del Plan que mencionamos, de pronto  vino el conflicto de Conga, que puso a Cajamarca otra vez en el escenario nacional con sus problemas y justas demandas,  lo que llevó a un misterioso giro al gobierno actual y de pronto la ministra de izquierda, que había pedido para su juramento retirar el crucifijo, fue rápidamente sustituida por otra mujer que está en las antípodas de las propuestas que había levantado. Ella, que al igual que su antecesora pidió que se retire el crucifijo para juramentar, pero por razones religiosas, pues ella pertenece a la iglesia Bautista,  dijo en su juramento como ministra “Ante Jesucristo, Admirable Consejero, Dios fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Sí prometo”(2), dando cuenta tanto de su profunda religiosidad y dando también una alerta de lo que se podría venir en un ministerio  en que se estaban trabajando propuestas en términos de derechos de las mujeres, que colisionaban con la mirada de algunas religiones sobre las mujeres como sujetas de derecho y dueñas de sus vidas y de sus cuerpos.Una entrevista de la nueva ministra, congresista del Partido Nacionalista  para más señas, en un programa de televisión en donde abiertamente expresó sus puntos de vista plagados de tintes religiosos, contra el aborto, la píldora del día siguiente, la existencia misma del ministerio,  dio las primeras alertas de que la casita que se estaba construyendo con la gestión de Mocha, como la llaman cariñosamente o no, a la ex ministra, era la de papel y no de ladrillo y que con esa perspectiva era claro que muchas de nuestras ilusiones podría llevárselas un ligero soplo de viento.En un país en que los niveles de discriminación hacia las mujeres y de violencia de género son tan altos,  pues se calcula que  hay unas 119,288 denuncias al año, es decir 9,941 al mes, 331 por día y 14 por hora (3), declaraciones como las de la ministra señalando, que no era necesario un ministerio de la mujer sino que habría que tener un ministerio de la familia, o que cuando una mujer que queda embarazada luego de una violación desarrolla una relación “sobrenatural” con el embarazo, expresan lo poco importante que es para ella lo que puedan sentir y vivir las mujeres sometidas a abusos y de cómo pueden imponerse las ideas de los grupos mal llamados PROVIDA al dolor y sufrimiento de una víctima.  Quizá la ministra nunca tuvo cerca un testimonio como el siguiente, expresado por una mujer de 29 años, hija de una mujer violada tras ser detenida y que quedó embarazada en una de las múltiples acciones de la Operación Cóndor en Chile.“Yo represento la prueba gráfica, represento el dolor más grande, lo más fuerte que ha vivido mi mamá en su vida... Había mucha rabia adentro de ella, yo la sentía. Esto ha marcado mi vida y es para siempre, no puedo nacer en otra familia, ni cambiar mis antecedentes…  Al principio traté de apoyarla a ella pero me di cuenta de que aquí hubo dos víctimas, no una.”Nunca oyó la ministra que en el país muchas de las mujeres violadas, que casi nunca alcanzan justicia, siguen llevando en sus vidas la impronta de este hecho doloroso, como también lo testimonian las mujeres violadas durante el conflicto armado interno. “Yo no sé qué podría hacer con este mi cuerpo. Si supiera que hay dentro de mi lo abriría mi cuerpo y lo sacaría, quizá viéndolo sabría qué es lo que tengo, eso pienso,” dice  Isabel Quispe Chipana, una de las mujeres víctimas de las violaciones en Llusita. (4)Las declaraciones de la ministra han generado la protesta de varias instituciones feministas, quienes han señalado que estas declaraciones han legitimado “la basurización del cuerpo de las mujeres.(5) Por estos días la ministra Ana Jara ha caído en un preocupante silencio, que ha sido roto en pocas ocasiones, como un episodio en que recomienda a  niños y niñas  hijos e hijas de trabajadores del ministerio que les pidan a sus padres la Biblia como regalo de Navidad.(6)Mientras tanto, en otro de esos misteriosos giros de la política y los políticos, la anterior ministra del MIMDES acepta la embajada en Uruguay y como para profundizar los enigmas asiste al inicio del nuevo mandato del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, quien ha sido acusado de violación a su hijastra,  ha perseguido a las feministas nicaragüenses y quien además se opone al aborto terapéutico prohibido en Nicaragua en el 2006, luego de ser permitido desde hacía un siglo. Las declaraciones de Rosario Murillo, esposa de Ortega, podrían hacernos fácilmente pensar en nuestra ministra actual. Murillo afirmó que el Gobierno de su marido, Daniel Ortega, protege la vida, “máxime tratándose de un embarazo a punto de concluir”. (7)Hacia dónde va el ministerio es aún uno de esos misterios que rondan en el país últimamente, pero lo que sí es cierto es que cada vez más voces se levantan pidiendo la renuncia de la ministra Ana Jara y reclaman al gobierno el giro que ha dado en relación a los derechos humanos, exigiéndole entre otros puntos “Garantizar el pleno ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de todas las mujeres; el acceso a métodos de planificación familiar y protección contra ETS, incluyendo la anticoncepción oral de emergencia; la prevención y atención de personas, en especial mujeres, con VIH-SIDA; la despenalización del aborto; la disminución del embarazo deseado y embarazo adolescente,” como se puede leer en la carta enviada por 5 organizaciones feministas al presidente.(8)Lo sucedido con el MIMDES, los retrocesos que se dan y lo fácilmente negociables que parecen ser los derechos de las mujeres quizá constituyan la oportunidad para que se profundice lo que Marcela Lagarde llama el Pacto entre Mujeres, que  implica retomar la agenda de las mujeres, que, como ella señala, “es histórica, compleja e integral, holística. Pero tiene una definición prioritaria: desmontar los poderes de dominio, la sexualidad expropiada y la expropiación del trabajo y de todos los productos y las creaciones de las mujeres. Nuestro pacto es por recuperar el mundo para las mujeres y recuperar nuestros cuerpos y nuestras vidas para cada una de nosotras a través de normas y derechos.”(9) Con seguridad para esto se necesite a otra ministra para quienes los derechos de las mujeres no son un misterio.Por Rosa Montalvo Reinosomadam@telefonica.net.pe Noticias Ser PerúLa Ciudad de las DiosasNotas:1)   Documento de Resultado de la Consulta del Plan Nacional para la Igualdad de Género PNIG 2012-2017. Informe final de consultoría, MIMDES, diciembre de 201.http://www.mimdes.gob.pe/consulta_pnig/Documento_Resultado_Consulta_PNIG...2) “Perú: Declaraciones de Ministra de la Mujer preocupan a sectores”, Cristianos fulltono.com, 22 de diciembre del 2011. http://actualidad.noticiascristianas.me/peru-declaraciones-de-ministra-d...3)   “Casos de violencia familiar y asesinatos de menores aumentaron el 2011”, El Comercio, 8 de enero del 2012. http://elcomercio.pe/peru/1358273/noticia-casos-violencia-familiar-asesi...4)  Comisión de derechos humanos, Llusita, Ayacucho, http://www.youtube.com/watch?v=0L5pKG549BY5) “Organizaciones feministas piden destitución de ministra de la mujer”, Manuela Ramos, 13 de enero del 2012. http://www.manuela.org.pe/organizaciones-feministas-piden-destitucion-de...6)  Flor Huilca, “La ministra ausente”, Suplemento Domingo, La República, 16 de enero del 2012.7)  “Una niña de 12 años embarazada reabre la polémica sobre el aborto en Nicaragua”, blog Comunidad de activistas Amnistía Internacional Venezuela, 3 de noviembre del 2011.http://amnistia.me/profiles/blogs/una-ni-a-de-12-a-os-embarazada-reabre-.... 3/11/20118)  Carta dirigida a Ollanta Humala Tasso, Presidente Constitucional de la República, por DEMUS, el Movimiento Manela Ramos, PROMSEX, Católicas por el Derecho a Decidir y el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, 12 de enero del 2011.http://www.demus.org.pe/nota_roja.php9) Marcela Lagarde y de Los Ríos, “Pacto entre mujeres sororidad”, Ponencia, . Coordinadora española para el lobby europeo de mujeres, Madrid, 10 de Octubre, 2006.  http://e-mujeres.net/sites/default/files/pacto_entre_mujeres_sororidad.pdf