Luce un MAQUILLAJE Afterwork

Cada vez somos más las mujeres que buscamos simplificar nuestra rutina diaria de maquillaje, y queremos no tener que estar horas delante del espejo para salir por la noche, y mucho menos si vamos directamente desde el trabajo.

El maquillaje afterwork cada vez se está poniendo más de moda, y claro, queremos que ya que pasamos un buen rato delante del espejo cada mañana para ponernos bellas, nos dure para salir después del trabajo.  

Por la mañana, suena el despertador, lo dejamos que suene dentro de cinco minutitos y finalmente nos levantamos a la carrera, con lo que tenemos el tiempo justo de ducharnos deprisita, desayunar y salir pitando para el trabajo.

Y si logramos maquillarnos en pocos minutos, batimos un nuevo record, pero ¿qué sucede si decides apuntarte a un plan después de trabajar? Ese maquillaje exprés que nos hemos hecho por la mañana no nos va a servir, y debemos disimular las horas de cansancio que nuestro rostro acusa.

Pues bien, hoy toca transformar un maquillaje de día en uno de noche, en pocos pasos.

Lo primero de todo es reforzar el maquillaje del rostro con la ayuda de unos polvos sueltos que ayuden a lograr que resulte uniforme y para matificar brillos si los hubiera.

Si tienes ojeras o bolsas, aplica antes de esto un poco de corrector para no dejar ni rastro del cansancio acumulado.

Ahora le toca el turno a la mirada. Apuesta por un lápiz de ojos negro, bordea la raya que ya habías hecho o dale un trazo diferente, eso ya va a gusto de cada una. Difumina el lápiz y lograrás un efecto ahumado que intensificará tu mirada.

Aplica máscara de pestañas para darles volumen, evita las sombras porque no suelen quedar bien encima de un maquillaje de día…

Ahora pasa a la zona de los pómulos, apuesta por una tonalidad rosada, que le aporte “salud” al rostro.  Potencia los labios, con una labial en un color intenso y retoca tus labios.

En un visto y no visto has pasado de un rápido maquillaje de día a un más que rápido maquillaje de noche.