Alegría y frustración, esta es la mezcla de sentimientos de Luis Peiret, "autor" del logotipo para la candidatura a los Juegos Olímpicos de Madrid 2020.
El diseño original es bastante distinto del que ha sido presentado finalmente. En este último se ha acentuado erróneamente Madrid, se ha cambiado uno de los colores del original y la manera de presentarlo llama además a equívoco, parece que pone 20020 en lugar de 2020.
"Prefiero que se sepa que es mi idea pero no mi logotipo; no es mi diseño", asegura Peiret, ya que ha sido modificado por TAPSA. El autor ha percibido 6.000 euros al ganar el concurso en concepto de "formación", mientras que, según un portavoz de Madrid 2020, la candidatura no habrá pagado nada a TAPSA por el rediseño.
Fuentes municipales señalan que en las bases del concurso se especificaba que se podrían hacer todas las modificaciones que la candidatura considerara necesarias en base a las peticiones del Comité Olímpico Internacional.
Visto en El Mundo.es
Estamos, nuevamente, ante otra situación vejatoria hacia el trabajo de un diseñador. Se ultraja su obra con la etiqueta de "no profesional", se le desmerece al considerar el premio como "formación". Y, además, no se cuenta con el autor para elaborar las "modificaciones necesarias" en su obra.
Para colmo, ¿TAPSA ha realizado el rediseño gratis? Bienvenidos al país del "pucherazo", del sainete y del "egipcio".
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