Madrid, el Real y el Imaginario

Viendo el cronograma de partidos que le espera al Real Madrid a partir del próximo miércoles cuando tenga que jugar por copa del Rey frente al Barcelona, no es nada descabellado pensar que se le puede complicar una liga que se presentaba favorable gracias a las victorias consechadas y a los puntos perdidos por el Barcelona.
El mal presagio no consiste en la seguidilla de partidos ya que no serán poco espaciados en el tiempo, por el contrario, al tener al menos cuatro días entre partidos, de perder el clásico, los jugadores tendrán que soportar el clima que rodea al Madrid tras cada derrota con el equipo blaugrana, y cuidado con perder puntos en la liga porque sería un verdadero escándalo en el jueguito mediático mediante el que se incentivan los odios de propios y extranjeros.

Por otra parte, se ha perdido de vista lo más importante: Cómo juega el Real Madrid. En marca.com han formado unos equipos para el partido del miércoles que los lectores pueden elegir con su voto virtual. Allí pueden verse formaciones como las que a continuación agrego.


Lo curioso del asunto es que siempre que hay un partido de esta magnitud, se habla de cómo debiera jugar cada equipo, pero se les pasa de largo analizar cómo han jugado hasta ahora. En tal caso, deberíamos aceptar que el Madrid no es un despliegue de genialidades.
Vaya uno a saber porqué, en el Real Madrid algunos jugadores juegan en puestos diferentes a lo que lo habían hecho en otros clubes.
Originalmente, Ronaldo era volante por derecha, a lo sumo extremo, siempre entrando en juego con la pelota en sectores donde había más espacios, para llegar vacío a la zona de definición. En dicha zona del campo se aprovechan varios recursos de Cristiano: La pegada en los centros cuando la jugada viene abierta por su sector, la precisión en el toque hacia atrás después del desborde, el desborde, dada su velocidad, el cabezazo cuando la jugada viene sobre el sector contrario, la aparición sorpresiva en diagonal ya fuese para definir dentro del área o para rematar de media distancia. Por supuesto, ocasionalmente apareciendo por izquierda, eso nadie lo niega.
En el Real Madrid juega casi de doble enganche porque está obligado a retroceder mucho cuando no le llega limpia la pelota, o de extremo izquierdo en raras ocasiones. Prefieren utilizar el recurso del buen disparo de media distancia, por lo que jugando por izquierda le queda el perfil óptimo. Sin embargo, al llevarlo a una zona donde hay pocos espacios, antes de definir está obligado a gambetear o hacer una genialidad toda vez que el equipo no provee mejores soluciones.

Algo parecido sucede con Özil quien siempre jugó de enganche empezando en el centro y terminando en los costados, dado que no es un jugador de gran aceleración, y espcialmente porque partiendo desde el centro hacia los costados es donde mejor encuentra los espacios.
En el Madrid juega exactamente al revés. Parte en los costados para terminar por el centro, y si bien al ser un crack se adaptó facilmente a esa posición, produce el efecto contrario al esperado en cualquier enganche: Se encierra entre los marcadores. En cualquier caso, es un gran jugador con un entendimiento perfecto del juego, por lo que igualmente ha sabido cotrarrestar tal problema con el genial último pase que tiene.

Da igual, de estas cosas no habla nadie. Ahí va todo el mundo a votar en marca.com el esquema que más le gusta sin detenerse a pensar que por mucho que dibujaran canchitas y colocaran puntitos negros con redondeles celestes, las características de los jugadores son las que siempre terminan definiendo el verdadero esquema.
Si yo fuese Mourinho, ya me habría suicidado, pero antes habría formado el siguiente equipo:

menosmarca.com

Si alguien tiene ganas de compartir su Madrid imaginario, será bien recibido y mal pensado.