Hoy vengo a poneros los dientes largos, fijaos que tela más divina.
También es africana, como la tela de ayer, y también regalo de la misma amiga.
En cuanto me la ofreció, la visualicé de mantel de terraza, y ahí la puse.
Ahora un secreto, que no se entere nadie, puesta está hace un par de semanas y el mantel sin hacer.
Creo que tengo cosas más interesantes por explorar que hacer un dobladillo.
A ello que voy.
Y sigo coso que te coso...