Mapa (León Siminiani, 2.012)

Mapa (León Siminiani, 2.012)
Ficha:
Título Original: Mapa.
Director: León Siminiani.
Guionista: León Siminiani.
Intérpretes: No hay Actores (Documental).
Productores: María Zamora, Stefan Schmitz.
Fotografía: León Siminiani.
Música:
Montaje: León Siminiani.
Países: España, India.
Lugares de rodaje: Madrid.
Año: 2.012.
Duración: 85 minutos.
Edad: Apta para todos los públicos.
Género: Biográfica, Documental.
Distribuidora: Avalon Distribución Audiovisual, S. L.
Estreno: 01-02-2.013 (Vizcaya: 22-03-2.013).
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 4.338.
Recaudación: 28.653,04 €.
Calificación: 7,081.
Sinopsis:
Un joven director español es despedido de su trabajo en televisión. Retomando su sueño de hacer cine, viaja a la India a "buscar" su primer largometraje para descubrir que su búsqueda real no está en India sino en Madrid: estaba huyendo. Sin embargo, a su vuelta a casa, las cosas no salen exactamente como había esperado.
Crítica:
24-03-2.013 – JOSU EGUREN
El rito del olvido
Una canción de Etta James. La vida. Fundido en negro. Títulos de crédito. Tan sólo han pasado seis minutos desde que enfrenté mis prejuicios con "Mapa" y éste es el eco de mi primera reacción. Apasionada, porque el documental-canción-poema de amor-vídeo diario de León Siminiani es uno de los ejercicios de amor al cine más rotundos de la última década.
Todo comienza con una ruptura sentimental que declina en viaje de autoconocimiento. Destino Nueva Delhi, India, donde Siminiani se parapeta tras la cámara tratando de recomponer los pedazos de un deseo frustrado que se enreda en el recuerdo amargo del fracaso amoroso. No viaja solo. Son dos pasajeros, Siminiani y el Otro, una escisión del yo que condena la actitud burguesa del turista del primer mundo azotándole con el látigo de la moral rivettiana. ¿Razón o emoción?, se pregunta el autor. ¿Pasolini o Moravia? Emoción, aunque la voz en off del Otro insiste en legislar la ética de su mirada. Nuevas reglas: equilibrio, control, asepsia... rotas por un fugaz movimiento de cámara con el que Siminiani desata todo el poder de un discurso que nos conduce a través de las ruinas de una película en permanente transformación.
Ahora Siminiani se contagia de Bécquer para perseguir los versos de 'El rayo de Luna', un arrebato poético que le obliga a regresar a Madrid para sentirse próximo a la mujer con la que sueña en las noches de su exilio sentimental. Pero de nuevo el fracaso, y un dolor que sangra por las heridas del rencor y el despecho. Uniendo todos estos puntos Siminiani traza el perfil irregular de una emocionante cartografía amorosa que registra el pálpito de la realidad mediante zooms erráticos y súbitos reencuadres. Un consejo: no escuchen a ese otro yo que censura la verbosidad de sus monólogos exteriores, y déjense arrastrar por un torbellino de imágenes que obra el prodigio de empaparnos de la emoción truffatiana con un baño intensivo de metalenguaje.