Más Fonty, más cocina, más global

Siempre es una buena noticia que restaurantes que se labran un destacado hueco en Madrid se hagan con otros locales para extender, evolucionar su oferta y transmitir su esencia a un mayor número de personas. Es el caso de Fonty, la ya emblemática pastelería francesa de la calle Castelló, en cuyos mediodías y brunch dominicales es prácticamente imposible encontrar un hueco.

Así viene siendo desde su apertura hace dos años, cuando la chef Marie Valdez instauró en el centro de la capital un concepto que no existía hasta la fecha, una pastelería fina de influencia francesa, asequible a pesar de todo, que aunaba la tradición centenaria del país vecino con las técnicas más actuales.

A ello comenzó a sumar, poco a poco, ligeros bocados salados que acrecentaron la afluencia de público a la hora de comer y, después, un delicioso y dominical desayuno tardío que se convirtió en la sensación del barrio. Aquellos que no hayan tenido la fortuna de hacerse con una mesa para probarlo, están de enhorabuena.

Fonty se expande ahora a la calle Juan Bravo, donde acaban de inaugurar vástago, un negocio estilo bistró, mezcla de cafetería y restaurante, que no abandona ni el dulce ni el salado pero lo aumenta y sirve en otros formatos. Ahora en Fonty se puede comer, comer de verdad, (y hasta cenar en breve, según nos adelantan) primero, segundo y postre que salen de unos menús o de una carta sin pretensiones pero cuidada, apetecible, para el día a día, que es lo que importa. Tartar de salmón o de atún rojo, chipirones a la plancha con romesco, ossobuco con polenta cremosa, secreto ibérico con crema de torta del casar, risotto con setas de temporada… Son solo algunas pistas de lo que la visita te depara. Los citados menús (hay dos, más sencillo o con algo más de miga) incluyen cremas variadas, ensaladas o platos ligeros para no pasarse de rosca.

Lejos del estilo francés clásico de la sede inicial, el nuevo Fonty viaja a otros países y captura pinceladas de Londres o Nueva York que se traducen en un entorno elegante, moderno y casual. Su interiorismo lo hace, si cabe, aún más llamativo como opción idónea para cualquier día de la semana.

Precio medio: 15-20 euros.

Juan Bravo, 41.

Tlfn. 911 38 86 46