Más y mas peste.

Después de los actos del primer aniversario de los atentados de Barcelona y Salou, el pestazo que desprende el asunto ha crecido todavía más.

Los actos del aniversario han servido para que quede más que claro quienes provocan y quienes son los agresores.

Ante las acusaciones de politización del acto por parte de la Arrimada desde varias semanas antes de la fecha, y también por respeto a las víctimas y porque el mayor Trapero i el ex conseller Forn lo pidieron se llegó a una acuerdo aparentemente aceptado por todos de no lucir banderas ni posturas políticas, demostración de madurez a la que se unió otra por parte del independentismo al decidir dar la callada por respuesta y evitar la presencia del Rey y los políticos del régimen.

Los únicos que no cumplieron fueron precisamente los que a partir de ahora llamaré los de la U.G.L., por Una, Grande, Libre.

El primer acto del día fue una comitiva desde el Ayuntamiento hasta el lugar del atentado: el mosaico de Miró en las Ramblas, en un respetuoso y sobrecogedor silencio. Al llegar al mosaico primero los familiares de las víctimas depositaron flores en unos soportes que se habían instalado, al cabo de un buen rato hicieron lo mismo la alcaldesa y el presidente de la Generalitat y se dio por acabado el acto municipal, pero el mosaico quedo rodeado por una multitud que guardaba un respetuoso silencio.

Hacia las 11 se inició el acto central en plaza Catalunya con la presencia del Rey, Pedro Sánchez y otros varios políticos de la U.G.L. y ahí se rompió estrepitosamente el principio de limitarse al homenaje a las víctimas porque se olvidaron de ellas y solo se oían vítores al Rey. La diferencia con el acto de las Ramblas era ofensiva, en una respetuoso silencio y en la otra gritos al Rey e insultos y agresiones a todo lo que representa independentismo e incluso Catalunya en general, hasta el extremo de cargarse incluso el acuerdo de no lucir banderas con un tenderete al principio de las Ramblas que vendía unos ridículos sombreros con la bandera española, que en poco rato aparecieron encima de las cabezas vacías de casi todos los franquistas.

Los pocos presentes se olvidaron totalmente de las victimas e incluso del atentado y transformaron el acto en una ruidosa manifestación de la U.G.L. repitiendo a gritos Felipe, Felipe…, como si fuese un delantero que acababa de marcar un gol, con gritos e insultos contra todo lo que no sea U.G.L.

Al final de esta nota he adjuntado 3 fotos, una de plaza Catalunya mientras se celebraba el acto donde se comprueba que a pesar del ruido y las barbaridades eran cuatro gatos porque frente a la negativa a investigar el atentado la mayoría de barceloneses le dieron la espalda al acto. La segunda muestra a los de la U.G.L. agrediendo a un joven porque llevaba una pancarta que pedía respeto para las víctimas y que se sepa la verdad, algo que parece ser muy grave para los franquistas, y la tercera es una vergonzosa comparación entre la conmemoración del primer aniversario del atentado a los bistrots de Paris y del atentado de Barcelona por la U.G.L.

A todo esto debe añadirse que se tiraron escupitajos a la comitiva del presidente Torra, y alguno alcanzó a Laura Masvidal, pareja del encarcelado Joaquim Forn, se golpearon y abollaron furgonetas de los mossos y a pesar que en el acto conmemorativo se leyeron textos en ocho idiomas, los de todas las víctimas, cuando Gemma Nierga leyó el discurso central en catalán se oyeron repetidos gritos, acompañados por supuesto por insultos, exigiendo que se hablase en castellano. Cuando los de la U.G.L. se cansaron de rebuznar, agredir y cometer barbaridades en plaza Catalunya bajaron por las Ramblas dirigiéndose al mosaico de Miro que estaba rodeado por una multitud en respetuoso silencio, pero en cuanto los U.G.L. llegaron se acabó una vez más el respeto a las víctimas y empezaron las broncas, hasta que a un inteligente ciudadano que sostenía una guitarra con un lazo amarillo se le ocurrió empezar a cantar Imagine de John Lennon, los asistentes respetuosos empezaron a cantar a coro, y , probablemente cuando se dieron cuenta de que eran minoría, los valientes de la U.G.L. dieron media vuelta para regresar a plaza Catalunya, y al rato la naturaleza demostró su inteligencia descargando un descomunal chaparrón sobre Barcelona que acabó con tanta estupidez. Por supuesto, la prensa de Madrid lo ha explicado al revés y ha publicado otro tipo de fotos.

Solo dos cosas para acabar. Primero destacar que después de los actos del 17 A los que más han criticado la politización del acto evidentemente por parte de sus contrincantes han sido Albiol y Arrimadas que demostraron su infinita caradura y de paso Arrimadas demostró al mismo tiempo su estupidez e ignorancia cuando a una locutora de la sexta le dijo que ni Macrón ni Merkel permitirían faltas de respeto a su rey. Segundo, cada vez estoy más convencido de la inmensa dimensión de las cloacas del Estado, de la conexión entre el CNI y el imán de Ripoll y de que la razón de que el problema de Catalunya empeore cada día que pasa es que se trata de la estrategia que inventó Aznar y después se apuntaron a ella C’ y PSOE que se basa en que cuanto peor está el problema catalán la catalanofobia española les vota cada día más sin problemas.