Revista Educación

Máster de Formación del Profesorado en la UCAM, mi experiencia

Por Henar Henar Maroñas @la_tiza_magica

Máster de Formación del Profesorado en la UCAM, mi experiencia
Este uno de los post que más ganas tenía de hacer. Desde que comencé mi andadura por esta universidad murciana tuve claro que expresaría mi opinión en el blog. Ahora que han pasado unas cuantos meses desde que terminé en septiembre (sí, suspendi en junio) es hora de hacerlo.
Comenzaré explicando por qué decidí matricularme en esta Universidad. Una vez acabada la carrera de Pedagogía, a pesar de ser maestra, es necesario cursar el Máster de Secundaria (hasta el año 2009 siendo maestro y pedagogo no era necesario). Buscaba una universidad que no se saliera de presupuesto y siendo Licenciada me podían convalidar todo menos el trabajo fin de Máster. 
En mi comunidad no era posible (no convalidaban, no tenían mi especialidad y era clases por la tarde en el horario que yo trabajaba), en la UNED donde había hecho Pedagogía me ocurría parecido (mi comunidad no ofertaba mi especialidad, no me convalidaban y se me ponía la broma en 2100 €, como positivo no había exámenes pero sí muchos trabajos y las opiniones de este máster eran pésimas). Un día un compañero me habló de esta universidad y decidí informarme. De precio estaba bien (3000 euros sin convalidar, 1080 € convalidando) y además sólo debía cursar el TFM, con un viaje a Murcia estaría todo hecho.
Los problemas comenzaron nada más matricularme. Viviendo a más de 900 km de distancia debía hacer todas las gestiones por correo electrónico y por teléfono. En el Departamento de Educación creo que ya todos se saben mi nombre. Todos los profesores me tenían en su lista de trabajos a pesar de tener todo convalidado, por lo que yo debía estar pendiente cuando colgaban grupos de no aparecer.... durante 4 largos meses.
Cuando me asignaron a la tutora del TFM pensé que no podía haber sido peor (tras conocer experiencias y opiniones de otros compañeros doy fe de que era posible) porque mi profesora era nueva y no había tutorizado antes. Hasta aquí todo salvable, pensé que habiendo hecho dos carreras antes ya dominada las cuestiones de la Universidad. 
La tutorización iba genial, le encantaban mis ideas,.... hasta que de pronto dejó de contestar mis correos... No conseguía localizarla en el despacho ni el correo hasta que llamé a la Universidad y me dijeron que se encontraba de baja por maternidad. Si sí, como lo lees, en mitad de la tutorización dio a luz. Estaba claro que una recién parida no estaba en condiciones de corregir, pero ¿qué culpa tenía yo? Que no la hubieran puesto.... porque esto no era una operación repentina sino algo evidente y predecible.
Contestando con dificultad y terminando a tiempo el trabajo fui a la exposición de junio. Las críticas durante la exposición fueron constantes, salí de allí diciéndole a mi pareja que me iban a poner un 3. No, no fue un 3, finalmente de nota me pusieron un 3,5. 
Tras mi cabreo inicial, ya que el tribunal me dijo que debía rehacer el trabajo completo, me puse en contacto con mi tutora. Esto era finales de junio y debía tener en cuenta que agosto la Universidad no trabaja. Se sumó a esta situación el ingreso de un familiar así que el poco tiempo libre que tenía lo dedicaba a hacer el maldito trabajo. Toda la planta de Cardiología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla sabía que tenía el TFM para rehacer porque mientras estaba allí y podía me dedicaba a ello.
Mi tutora tardaba una media de una semana/días en contestar los correos así que, cansada de esperar, decidí hablar con la Decana de la Universidad que llamó la atención de la profesora. A todo esto para conseguir el informe del tribunal acabé por ponerme en contacto con ellos personalmente. Gracias a uno de los miembros del tribunal, que consideraba que lo que me ocurría no estaba bien, conseguí rehacer el trabajo con su ayuda. Intenté cambiar de tutor pero sólo era posible si repetías curso.
Correcciones a última hora, poca ayuda,..... Tuve claro que iba a la exposición de septiembre con una cosa clara: o aprobaba o liaba una buena en la propia universidad, consejería o donde hiciera falta. Sí, aprobé en septiembre pero nunca recomendaré esta universidad.
Todo el mundo me decía que era raro siendo una universidad privada, que vale una pasta. Tengo claro que el interés debe ser económico, que no vale la pena estudiar en ella y que la organización brilla por su ausencia. ¿Cómo se les ocurre poner a alguien que dará a luz en mitad de la tutorización y que va a tener que coger la baja maternal? Si pudiese dar marcha atrás habría elegido otra universidad, incluso la UNED, que tenía muy malas críticas. Siempre que me preguntan por el Máster digo que en la UCAM no. Durante el verano conocí a otras personas suspensas como yo, cuyos tutores pasaban igual que el mío, no es una cuestión generalizada sólo de la mía.
He pasado por tres universidades, dos públicas y una privada y sin duda me quedo con cualquiera que no sea esta. Mis compañeros además se quejaban de que los apuntes para estudiar estaban mal redactados pero es algo de lo que no puedo hablar en primera persona. Espero que mi opinión sirva para otras personas que piensen en elegir esta universidad.


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