Medicina en “color”

Hay que aprender a poner color a la vida… y a la enfermedad. Día a día. También los médicos y todos los trabajadores de la salud . Con frecuencia la enfermedad tiñe de gris la vida del paciente y de su familia. Y es necesario que recupere el color, la melodía, la belleza. No con un falso optimismo que oculte la realidad y la gravedad de la situación, sino reforzando las posibilidades y fortalezas del paciente. Ayudando a enfocar en la dirección adecuada en vez de consumir energía en lamentos y autocompasión.

Es cierto que se considera tradicionalmente la salud como un componente fundamental del concepto predominante de “felicidad”. Pero puedo atestiguar que he conocido muchas personas con enfermedades incluso muy graves, que podrían considerarse como razonablente felices. ¿Su secreto? No “tirar la toalla”, apoyarse en sus propias fortalezas y capacidades y sobre todo, querer y dejarse querer por amigos y familiares. Sin lugar a dudas, las creencias religiosas y los valores también influyen en el afrontamiento de la enfermedad. Y también nosotros, los sanitarios. La confianza, apoyo, disponibilidad y tiempo que dediquemos a nuestros pacientes servirán para aportar “color” a su enfermedad, y para justificar nuestra vocación de ayuda.

Ah… ¿que no tienes vocación de ayuda? ¿que la administración no te permite dar “color” a tus pacientes en los menos de cinco minutos que tienes para ello? ¿que se te han acabado los “colores” y te hallas cansado, estresado, exigido y sobrepasado? Bueno… quizás también nosotros necesitemos recuperar el “color”. Nadie puede dar de lo que no tiene.

Esa es la razón por la que retomo este blog y desempolvo sus letras. Con un nuevo estilo visual, más simple, sencillo, limpio.. con más “color”. Con la intención de aportar un pequeño y modesto “arco iris” en unos momentos en los que el gris es predominante en nuestro entorno. Espero que te guste y que tambien ayudes a pintar este blog, con tus colores en forma de comentarios. Sientete libre para ello.

photo credit: Alberto Sánchez Mena via photopin cc