Revista Cocina

Mejillones al vapor

Por Asun Primoy @Recetashuga
Mejillones al vaporHoy os traemos uno de esos grandes tesoros que nos da el mar, los mejillones. Como buenos gallegos haremos mención a los mejillones de las Rías Gallegas, grandes productoras de estos bivalvos. Nuestras costas están repletas de este molusco, pero no es nada recomendable cogerlos directamente de las rocas ya que necesita ser depurado, no compensa arriesgarse ya que en el mercado están muy bien de precio. El mejillón se cultiva en las bateas, construcciones que están en medio del mar de las cuales cuelgan cuerdas repletas de cría de mejillón. Cuando el mejillón esta listo para la recolección, se levantan las cuerdas y se lleva a la depuradora proceso indispensable para su consumo, en ella se filtran y se eliminan posibles toxinas. Esta es una de las recetas mas clásicas en Galicia del consumo del mejillón, es la mejor receta para apreciar el intenso sabor de este bivalvo, al no enmascarar el sabor con muchos ingredientes, no por esto dejaremos de enseñaros en futuras recetas otras maneras de prepararlos también muy buenas.

Ingredientes

1 o 2 mallas de mejillones
1/2 vaso de agua
2 hojas de laurel
1 limón (opcional)

Preparación

mejillonesLavamos los mejillones y les eliminamos la mayor cantidad de hilos y algas. Comprobamos que todos los mejillones estén en perfecto estado y vivos, para hacer esto comprobamos que todos los mejillones estén bien cerrados, si los vemos abiertos, deberemos golpearlos y se tiene que cerrar, en caso contrario lo desecharemos al igual que los que estén rotos, este paso es muy importante.
mejillonesCogemos una pota alta e incorporamos dentro el agua, echamos también las hojas de laurel y los mejillones limpios. Ponemos a fuego alto y dejamos que levante un hervor con la tapa puesta. Cuando se levante el hervor retiramos y servimos. Aconsejamos comerlos calientes, en Galicia se acostumbra acompañarlos con limón exprimido, pero esto es al gusto, hay gente a la que le gusta con limón y otra que los prefiere sin el, probadlo y decidid.

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